En una reciente investigación llevada a cabo en el Cementerio de La Plata se descubrieron dos nuevos depósitos con un total de dos mil bolsas con cuerpos sin identificar, que se suman a los hallazgos de más de 500 ataúdes abandonados y 200 bolsas con restos óseos de la semana pasada.
La causa, dirigida por la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°15, a cargo de la fiscal Cecilia Corfield, busca determinar la identidad de los cadáveres y esclarecer las circunstancias que rodean este misterio macabro.
La Municipalidad de La Plata inició una denuncia penal tras los primeros descubrimientos de la semana pasada, y actualmente la Justicia trabaja en colaboración con agencias especializadas tanto provinciales como federales para abordar el asunto.
“Entre la presentación de la denuncia realizada el martes 20/2 y la ratificación del viernes 23/2, se registró el hallazgos de más restos humanos colocados irregularmente en diversas dependencias en mal estado que permanecían cerradas o clausuradas, que también fueron denunciados”, comentó el intendente platense Julio Alak en la red social X, y explicó que los hallazgos fueron consecuencia de auditorías ordenadas por el gobierno municipal.
“Esta horrorosa situación es producto de la desidia e irresponsabilidad absoluta”, comentó Alak. Entre las hipótesis que se manejan, se incluyen posibles negligencias, incumplimientos de deberes por parte de funcionarios y hasta la venta ilegal de restos y ataúdes. De momento, no hay sospechosos ni imputados en el caso.
Según fuentes municipales, se estima que en cada una de las dos mil bolsas hay un cuerpo, por lo que se trataría del descubrimiento de dos millares de nuevos cadáveres.
Las dimensiones de este caso son enormes, con 24 hectáreas del cementerio aún por revisar completamente, lo que podría resultar en el descubrimiento de más restos. Además, se investigará si entre los cuerpos encontrados se encuentran víctimas de la inundación de La Plata en 2013 o de la última dictadura cívico-militar, dado el oscuro historial del cementerio respecto de la inhumación de cuerpos sin identidad.
Según publicó el sitio 0221.com.ar el director del cementerio se presentó en la fiscalía, ratificó la primera denuncia y la amplió con la información de estos dos nuevos depósitos con un millar de cuerpos sin identificar. Además, las mismas fuentes adelantaron que no se descarta que se encuentren más restos humanos porque quedan lugares donde revisar.
Días atrás, los hijos de Julio López, víctima sobreviviente del terrorismo de Estado y desaparecido en 2006 tras declarar en un juicio de lesa humanidad contra Miguel Etchecolatz, pidieron a la Justicia que coteje los patrones genéticos de cada uno de los cuerpos hallados para ver si allí está su padre.
Alfredo Gascón, abogado de los hermanos Rubén y Gustavo López, presentó un escrito ante la Justicia para que declare una medida de “no innovar” con el fin de que se compare “urgente” el material genético de los 501 féretros y más de 200 bolsas con restos humanos con los de López encontrados días atrás en la capital bonaerense donde, justamente, vivía la víctima.
“Pudiendo ser de utilidad para los hechos que aquí se investigan, solicito se dicte medida de no innovar para que la Municipalidad de La Plata se abstenga de modificar, mudar, alterar y/o introducir cambios en los elementos descriptos”, dice el escrito del abogado, presentado el miércoles 21 de febrero, al que tuvo acceso Infobae.
“Antes de la pandemia ya habíamos presentado un escrito porque ya se habían descubierto 66 tumbas NN en cementerio de La Plata, que está a cuatro cuadras de la casa de mi viejo. Sería increíble y canallesco pero no es descabellado pensar que podrían estar los restos de mi viejo ahí”, explicó a este medio Rubén López, y agregó: “Ahora, con esta novedad de los restos que se encontraron, volvimos sobre eso. Nunca bajamos la esperanza de que en esas tumbas, o en entre estos restos que aparecieron ahora, pueda estar mi papá”.
Según explicaron en la familia López, los pasos lógicos serían que a partir de este momento intervenga sobre la investigación la fiscalía de Lesa Humanidad que lleva el caso de la desaparición de Jorge Julio, visto por última vez el 18 de septiembre de 2006, un día antes de la condena a perpetua dictada contra el represor Miguel Etchecolatz.
El militante había declarado como testigo en la causa, ya que fue víctima de desaparición forzada durante la dictadura y sobrevivió para contarlo. Una imagen que tomó el fotorreportero Leo Vaca en 2014 durante otro juicio contra Etchecolatz exhibió que el genocida tenía un papel entre sus manos en el que estaba anotado, a mano, el nombre de Jorge Julio López y la palabra “secuestrar”.
Con la ampliación de la denuncia, la Justicia deberá determinar las identidades de los más de 2.500 restos de personas judicializados. El primero de los objetivos de la investigación será separar los restos identificados de los que figuran como NN y luego se tratará de identificar a estos últimos. Los restos pueden ser de cualquier época y no descartan que haya restos de víctimas de la inundación de La Plata ocurrida entre el 2 y 3 de abril de 2013.
De acuerdo con la información de 0221.com.ar la fiscal piensa conformar una mesa de trabajo con agencias del ámbito provincial y federal especializadas en el tema. “Es una causa que llevará años”, adelantaron fuentes de la investigación.