El próximo 2 de marzo se cumplen nueve meses del crimen de Cecilia Strzyzowski en Resistencia. Con la causa próxima a elevarse a juicio, una pericia caligráfica determinó que a la víctima le falsificaron la firma en el acta de divorcio con César Sena, que se consumó cuatro días después de haber pasado por el Registro Civil.
El informe de 10 páginas, al que accedió Infobae, fue solicitado en diciembre de 2023 por el Equipo Fiscal Especial (EFE). Casi dos meses y medio después, el 23 de febrero último, la Licenciada en Criminalística y Criminología, Silvana Bonillo, y actual Jefa de División del Gabinete Científico Judicial de Chaco, determinó que la firma de Cecilia fue inserta de manera fraudulenta en el acta de divorcio.
Para llegar a esa conclusión, la especialista realizó un exhaustivo análisis de la rúbrica de la joven en el que comparó más de una decena de firmas, entre ellas, las que se hallaron en comprobantes de pagaré, remitos de una empresa, un documento de atención técnica y una boleta de un comercio de equipamientos.
También se sumaron textos escritos a mano y distintas fotografías: las del acta de matrimonio, obtenidas en el Registro Civil de la Provincia; y otras del expediente de la Dirección de Habilitaciones Municipales, correspondientes a una solicitud de habilitación comercial iniciada por Cecilia, que permitió la apertura de “Gato Negro”, local que tuvo en sociedad con su marido.
Una vez recopilados todos esos documentos se realizó lo que se denomina un “análisis scopométrico”. Según detalló el informe: “Para el mismo es fundamental la observación. Como primera medida, se realiza la misma a simple vista, mediante iluminación a la “luz del día” (luz solar) y luego con luz artificial. La luz debe incidir sobre el documento a estudiar en direcciones diversas, perpendicular, luz rasante, por transparencia”.
La observación se complementó con instrumental óptico, es decir, lupas, lupas binoculares estereoscópicas y/o microscopios, “que habilitan la contemplación de detalles morfológicos de singular importancia”.
Finalmente, tras el análisis, indicaron: “Deviene el proceso de comparación que nos permite determinar las características generales y particulares de los elementos analizados a fin de establecer la autenticidad o no de ellos”. La perito en el texto enfatizó acerca de las características particulares de la firma: “Estas peculiaridades pueden ser circunstanciales o permanentes, además de ser invisibles o poco aparentes, siendo estas últimas las que poseen mayor valor probatorio al momento de la identificación”.
El resultado fue contundente: “Conforme a los elementos indubitados (NdR: que no admite dudas) con que se contó para el cotejo y realización del presente informe, la firma estampada en el sector inferior del expediente no se corresponde con las características grafoestructurales de la firma de la Sra. Strzyzowski, Cecilia Marlén”.
A diferencia de la firma de Cecilia en el acta de Matrimonio, la que está plasmada en el Divorcio sí generó dudas para la perito. Lo llamativo es que, debajo de la rúbrica de la joven, en el acta, se lee su nombre y apellido, número de documento, correo electrónico y teléfono celular, todo escrito a mano.
Entonces, ¿cuál es la hipótesis con respecto a la firma de Cecilia? “Si bien la aclaración de la firma sí pertenece a la joven, no así su firma. Por la cantidad de trazos, por dónde comienza y cómo finaliza, se entiende que no es de ella. Es muy probable que Cecilia haya colocado sus datos en una hoja en blanco y que luego eso fuera usado con otros fines”, confiaron a este medio allegados al expediente.
El acta de la disolución legal del matrimonio estuvo patrocinada por los abogados Edgardo Daniel Paniagua y Andrea Verónica Lara, que además es vicepresidenta del Colegio de Abogados de Resistencia. Sobre esta institución, allegados a la causa comentaron a Infobae, que también hay ciertas suspicacias.
“El presidente del Colegio, José Galassi, supo ser querellante de la causa en representación de la familia Strzyzowski y terminó siendo apartado por ‘embarrar la cancha’, luego de pedirle a Gustavo Melgarejo que declare que el cuerpo de Cecilia estaba en un basurero. Ahora es la vicepresidenta quien está involucrada en otra ‘irregularidad’”, aseguraron.
Por lo pronto, los letrados Paniagua y Lara serán indagados en la investigación paralela que se abrió a partir de esta revelación. Un detalle que arrojó la pericia es que la firma de César Sena sí era la suya.
Acerca del divorcio
El 16 de septiembre de 2022, cuando César Sena y Cecilia Strzyzowski pasaron por el registro civil, la familia Sena no estuvo presente porque nadie sabía que iban a casarse. César se casó a escondidas. Los testigos fueron dos amigos de la pareja. Ninguno supo que se divorciaron cuatro días después de dar el “Sí”.
Según declararon al momento de pedir el divorcio, César y Cecilia juraron que no existían “bienes a dividir” y que ambos trabajaban y poseían “independencia económica, no dando lugar ni a compensaciones económicas ni a indemnizaciones de ningún tipo por la corta unión”.
Sin embargo, fuentes del caso consideran que la falsificación de la firma podría tener que ver con este punto. “Refuerza la hipótesis de que hubo algún tipo de motivación económica detrás del crimen y que Cecilia era un ‘obstáculo’ para los planes familiares futuros de los Sena”, indicaron a este medio.
La separación fue ratificada el 21 de diciembre de ese año, cuando el Juzgado de Niñez, Adolescencia y Familia N°5 firmó la sentencia de divorcio.
A pesar del trámite adulterado, Cecilia sospechaba del divorcio. Así lo manifestó su madre, Gloria Romero, según consta en la causa. “Una vez habíamos hablado del divorcio, donde Cecilia me contó que César le había hecho firmar varios documentos que desconocía su contenido, los cuales fueron preparados por el abogado de Marcela Acuña”, dijo la mujer.
Por otro lado, un testigo de identidad reservada, de nombre “Papa”, contó algo similar. “(Cecilia) Me dijo que se tenían que divorciar, por una cuestión de la herencia de César. Yo no sé, después, en qué terminó eso. Pero tengo entendido que siguieron juntos. Ese día, en el chat, Cecilia me escribió: ‘No me importa la plata. No le perdono que vendiera nuestro divorcio. Le puso precio a nuestro amor’”.
La causa tendrá novedades esta semana, puntualmente el próximo miércoles 28 de febrero, cuando el dirigente social Emerenciano Sena, recientemente procesado en otra causa por trata de personas, se presente a una audiencia en busca de la prisión domiciliaria, beneficio al que aspira desde que quedó detenido alegando problemas de salud.