La investigación del femicidio de Cecilia Strzyzowski arrojó una nueva revelación en las últimas horas al conocerse que el acta de divorcio de la víctima con César Sena lleva una firma de ella falsa. Así lo estableció una pericia caligráfica, según confirmaron fuentes judiciales a Infobae.
“Conforme a los elementos indubitados con que se contó para el cotejo y realización del presente informe, la firma estampada en el sector inferior del expediente no corresponden con las características grafoestructurales de la firma de la Sra. Strzyzowski, Cecilia Marlén”. Esa fue la conclusión a la que arribaron expertos luego de analizar el documento que, cabe recordar, se tramitó solo cuatro días después de que la pareja contrajera matrimonio.
“Esta era una de las firmas de tipo ilegible confeccionada en dos tiempos de ejecución, de pequeña dimensión, con presión y velocidad constante con base recta”, describieron los peritos la rúbrica que supuestamente había estampado la joven desaparecida el 2 de junio de 2023.
Para el cotejo se utilizaron otros documentos que Cecilia sí había firmado, como la habilitación comercial de un local presentado ante la Municipalidad o el acta de matrimonio.
Por el contrario, la firma correspondiente a César Sena en los papeles de divorcio sí es auténtica.
La falsificación y adulteración del documento será investigada en un nuevo expediente penal, separado de la causa sobre la desaparición y femicidio de Cecilia.
Luego de que la pericia saliera a la luz, la madre de la víctima, Gloria Romero, se expresó a través de las redes sociales. “Otra prueba. Ella (por Marcela Acuña) dijo: “Cecilia no quería que sepa la madre que estaba divorciada porque era una madre muy violenta”. NO!! ES FALSA LA FIRMA, NO ESTÁN DIVORCIADOS”, manifestó y especuló: “Tal vez por eso la mataron, porque no quiso firmar. O tal vez se enteró”.
El caso
Cecilia Strzyzowski fue vista por última vez a las 9.16 del 2 de junio último, cuando una cámara de seguridad registró su ingreso, en compañía de César, a la casa de sus suegros, en la calle Santa María de Oro 1.460, de Resistencia.
Según la acusación de los fiscales Jorge Cáceres Olivera, Nelia Velázquez y Jorge Gómez, la joven fue asesinada entre las 12.13 y las 13.01 de ese día en una de las habitaciones de la casa, aparentemente por estrangulamiento, en momentos en que se hallaba junto a su pareja, Emerenciano Sena y Acuña.
Tras el crimen, su cuerpo habría sido trasladado por José Gustavo Obregón (por entonces colaborador de la familia Sena) y César, envuelto en una frazada a bordo de una camioneta Toyota Hilux hasta la chanchería propiedad de los principales imputados, donde habría sido calcinado.
Luego, sus restos habrían sido esparcidos en distintos sectores, entre ellos junto a uno de las márgenes del Río Tragadero, que linda con la chanchería.
Emerenciano Sena y su esposa fueron procesados con prisión preventiva por el delito de “homicidio agravado” el 4 de agosto último por el juez de Garantías Héctor Sandoval, mientras que el 22 de agosto, la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de Chaco confirmó la prisión preventiva para su hijo César, todos acusados por el femicidio de Cecilia.
También fueron procesados cuatro colaboradores del clan Sena: Fabiana González, Griselda Reinoso, Gustavo Melgarejo y el mencionado Obregón, quienes están acusados como encubridores del crimen.
La investigación continúa su curso en un intento de esclarecer cómo desecharon el cuerpo de Cecilia. Los últimos avances en el caso datan del 2 de enero, cuando el Instituto de Medicina Forense de Córdoba aseguró que los 16 restos dentarios hallados se encontraban en “estado de carbonización y calcinación” y que son compatibles con “piezas humanas en representación a un único individuo”. Sin embargo, los especialistas advirtieron que, dado el nivel de descomposición, no es posible confirmar si corresponden a la víctima.