Una autopsia “no concluyente” y dos imputados: qué se sabe del femicidio de la adolescente de 17 años en San Luis

A poco más de 48 horas del femicidio de Zoe Abigail Pérez Mora, la adolescente de 17 años hallada asesinada en la localidad de La Toma, San Luis, y por cuyo crimen ya hay dos sospechosos detenidos, esta tarde se conocieron los resultados preliminares de la autopsia aunque, según indicó la Justicia, “no son concluyentes”.

“El informe indicó que la causal de muerte fue por una ‘insuficiencia cardio respiratoria’, a referéndum de otros informes”, dijo la fiscal a cargo del caso, María del Valle Durán, titular de la unidad especializada en género de la Primera Circunscripción Judicial, durante una conferencia de prensa en la que también respondió preguntas de los medios locales.

De acuerdo con Del Valle Durán, la autopsia al cuerpo de la víctima “no fue determinante” y, por eso, solicitó la intervención de un médico patólogo. “Mi teoría, que es sumamente provisoria, es que murió por asfixia. Si bien tenía varias lesiones en el cuerpo, ninguna causó su deceso”, sostuvo.

Acerca de los informes complementarios, la funcionaria especificó que se trata de hisopados y análisis de sangre. Estos últimos servirán para establecer si Zoe intentó defenderse o ingirió algún tipo de sustancia antes del crimen. También explicó que se ordenaron pericias de teléfonos, tanto de la víctima como de los imputados, de geolocalización de los aparatos y de cámaras de seguridad de la zona.

Ricardo “El Gringo” Adrián Rodríguez (34) y Leandro Joel Oses (21) son los únicos detenidos por el crimen de Zoe Abigail Pérez Mora. Tras su arresto, la Policía Científica de San Luis constató que ambos tenían lesiones. “Las mismas deberán ser analizadas, ya que tanto la víctima como los imputados practicaban boxeo y kickboxing y dichas lesiones podrían ser compatibles con esos deportes”, detalló Del Valle Durán.

Por el momento, los sospechosos permanecen alojados en la Comisaría 7° y 39°, respectivamente, con prisión preventiva por 120 días. A Rodríguez se lo acusa de “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por género”. A Oses, en tanto, de “homicidio calificado por género”.

La fiscal además explicó que los dos hombres conocían a la adolescente y que uno de ellos (NdR: Oses) tenía un vínculo de amistad con la víctima, “ya que compartían actividades del gimnasio”. “Con el otro (NdR: Rodríguez) tenemos sospechas de que pueden haber tenido una relación sentimental. Hasta ahora no está acreditado”, dijo Del Valle Durán.

Tras la detención, ninguno declaró ante la Justicia. Consultada por la prensa, la fiscal aclaró acerca del historial de Rodríguez y Oses. “No se registró que tuvieran antecedentes condenatorios. De cualquier forma, eso no quiere decir que no tengan antecedentes judiciales o en proceso”, sostuvo.

Según las primeras versiones, la noche del lunes 19 de febrero Zoe le dijo a su madre que iba a ver un partido de básquet junto a una amiga y que después regresaba a su casa. Pero jamás volvió. Al día siguiente apareció muerta.

De acuerdo a la reconstrucción efectuada por los investigadores, a la adolescente la mataron entre las 10 y las 11.30 de la mañana del martes 20. Su cuerpo fue hallado en una propiedad ubicada en la calle Inti Huasi, entre Estanislao del Campo y Ricardo Güiraldes, del barrio Barrancas de La Toma. “Estaba acostada en una cama, mirando para arriba, vestida y aparentemente con lesiones”, indicaron fuentes del caso a Télam.

Fue el dueño del gimnasio al que asistía la adolescente, de apellido Figueroa, quien la encontró sin vida y dio aviso a la policía. “A las 11.25, por pedido de ‘El Gringo’ Rodríguez, Figueroa se hizo presente en su domicilio de la calle Inti Huasi. Fue con su hijo de 10, sin saber qué necesitaba el hombre. Cuando llegó, Rodríguez le dijo: ‘Vení a ver a Zoe que está en la cama. Antes estaba en el piso, pero yo la levanté. No sé qué le pasa’. En ese momento, el profesor constató que la chica estaba sin vida. Le pregunto qué habían hecho y Rodríguez no contestó. Entonces fue y buscó a la policía”, contó la fiscal.

La funcionaria también explicó que Oses no estaba en el lugar del hecho, sino afuera en la puerta de la casa. “Fue Rodríguez quien dijo que él estuvo ahí adentro. Lo detuvimos por flagrancia. Después, se comprobó que ese 20 de febrero no fue a trabajar, que le mintió a su jefe y a su hermano y les dijo que estaba en San Luis”, agregó.

El crimen de Zoe sacudió a la localidad de La Toma, de 9 mil habitantes, a tal punto que los vecinos buscaron ingresar a la propiedad donde encontraron el cuerpo de la adolescente para hacer “justicia por mano propia” contra los principales sospechosos.

“Nos encerraron, tiraban piedras, lastimaron a civiles y policías. Querían que les entregaran a los detenidos y no dejaban que Científica pudiera buscar los elementos que tenían en los móviles. Tienen que dejar trabajar a la Justicia”, volvió a insistir, este jueves, la fiscal.

Frente a lo sucedido, el gobernador Claudio Poggi emitió durante la jornada de ayer un comunicado en el que expresó sus “condolencias a familiares, amigos y seres queridos de Zoe Pérez” y su “acompañamiento al pueblo de La Toma y en especial a los chicos e integrantes de la comunidad educativa del Colegio Belgrano (NdR: donde asistía la víctima), en estos días cargados de tristeza y dolor para quienes compartían su amistad y sus sueños”.

Según reconstruyó Télam, en los últimos 14 años, se registraron tres femicidios en la localidad de La Toma. Por su parte, la fiscal pidió que: “Quien pueda aportar un dato de interés a la causa, que se acerque”.