Dos ladrones abordaron a un policía en Quilmes para robarle su motocicleta, el oficial se resistió y sacó su arma reglamentaria, defendiéndose a los tiros. Dos balas alcanzaron a los ladrones, quienes murieron a pocos metros del lugar.
El hecho sucedió ayer cerca de las 19 horas en el cruce del Camino General Manuel Belgrano y calle 855, a dos cuadras de la rotonda de Monteverde, Quilmes Oeste, donde un oficial de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas de la Policía Bonaerense estaba detenido en una esquina a bordo de su moto.
De repente, el hombre, que se encontraba de franco e iba vestido de civil, fue interceptado por ños delincuentes que lo amenazaron para robarle su moto. En consecuencia, el policía se identificó como un miembro de la fuerzas de seguridad y extrajo su arma.
Así, abrió fuego contra los ladrones. Realizó cuatro disparos. Dos de ellos alcanzaron a sus atacantes, quienes se dieron a la fuga heridos.
Sus cuerpos fueron encontrados a pocas cuadras del lugar: uno de ellos tenía una herida de arma de fuego en el tórax, mientras que el otro contaba con un impacto de bala a la altura del omóplato.
Ante esto, una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) se hizo presente en el lugar y constató la muerte de ambos ladrones.
Tiempo después la fiscal a cargo del caso, Mariana Curra Zamaniego, de la Unidad Funcional de Instrucción N° 6 de Quilmes, llegó a la escena para supervisar el relevamiento de las pruebas, procedimientos que se extendieron hasta la madrugada de este jueves.
Un hecho similar tuvo lugar el martes por la mañana en la zona sur del Conurbano bonaerense, cuando un policía fue abordado por dos delincuentes armados que se movilizaban en una motocicleta sobre la calle Nuestras Malvinas y calle 35, partido de Florencio Varela.
“Uno llevaba un cuchillo y el otro un arma que resultó ser una réplica”, explicaron las fuentes a este medio. Lo cierto es que uno de los ladrones se bajó de la moto, el que iba de acompañante, lo apuntó con un arma de fuego y le exigió sus pertenencias.
Fue en ese momento que el oficial -que se desempeña en la Comisaría Vecinal 1F de la Policía de la Ciudad y se encontraba de vacaciones- se identificó y repelió el intento de robo a los tiros con su arma reglamentaria Bersa Thunder calibre 9 milímetros.
Dos de los balazos impactaron en la pierna derecha y en la cabeza de uno de los ladrones, que cayó al suelo y fue abandonado en el lugar por su cómplice, quien escapó en la moto.
El sospechoso, de 21 años, fue trasladado al Hospital Mi Pueblo por una ambulancia del SAME. Horas después, el joven criminal, identificado como Facundo Bosoms, perdió la vida.
A raíz del fallecimiento, la carátula de la causa, que inicialmente había sido de “tentativa de robo”, cambió a “homicidio”. En el caso interviene el fiscal Darío Provisionato, de la Unidad Funcional de Instrucción N°1 de Florencio Varela, quien a partir de los primeros elementos de prueba recabados en la investigación consideró que el policía actuó en legítima defensa.
*con información de Télam