Un hombre y su hijo de 8 años fueron víctimas de un feroz robo piraña en la localidad de Aldo Bonzi, partido de La Matanza, cuando ambos arribaban a su domicilio. Ocho ladrones a bordo de motocicletas los atacaron mientras el hombre estacionaba su camioneta 4x4 en la puerta de su casa. En medio de la desesperación el menor se arrodilló en la vereda para pedirle piedad a los asaltantes, que en su mayoría estaban armados.
La secuencia, que ocurrió este miércoles por la tarde, duró poco menos de dos minutos, tiempo suficiente para que los motochorros lograran reducir al padre y su hijo antes de fugarse en banda y con la camioneta Volkswagen Amarok blanca en su poder.
Una cámara de seguridad registró la secuencia completa, que ocurrió en la esquina de las calles Ana María Janer y José Alico, a tan sólo dos cuadras de la Subcomisaría de Aldo Bonzi.
Según muestran las imágenes, las víctimas arribaron a su domicilio pocos segundos después de las 19.50. El conductor a cargo estacionó su vehículo en la puerta de su casa y hasta este momento todo se desarrollaba normalmente. Sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos ocho delincuentes que se movían en cinco motos los rodearon a él y a su hijo, y los apuntaron con armas de fuego para que descendieran de la camioneta.
Sin oponer ningún tipo de resistencia, el niño, que viajaba en el asiento del acompañante, bajó del rodado ni bien uno de los ladrones abrió la puerta de su lado. Visiblemente asustado, el menor descendió con las manos en alto y cruzó a la vereda de enfrente, donde terminó arrodillado. Su padre, en tanto, tampoco intentó evitar el robo de su camioneta: le dejó las llaves del vehículo a los delincuentes y cruzó la calle para acompañar a su hijo.
Al cabo de menos de dos minutos, dos de los asaltantes se subieron a la Amarok, le dieron arranque y se dieron a la fuga junto al resto de la banda.
Fuentes judiciales consultadas por Infobae confirmaron que el vehículo luego fue hallado abandonado en el partido bonaerense de Esteban Echeverría. Por su parte, personal de la Policía Científica obtuvo huellas durante la requisa a de rigor a la camioneta, pero aún resta determinarán si son aptas para el cotejo correspondiente.
La causa. calificada con el delito de robo agravado por el uso de arma, quedó a cargo de la fiscal Alejandra Núñez, de la UFI N° 8 del Departamento Judicial de La Matanza. Hasta el momento, las autoridades no pudieron identificar a ninguno de los sospechosos. Tampoco hay detenidos.