Hernán Orlando Tolosa, de 58 años, notó que no tenía escapatoria e intentó un último movimiento: le ofreció a la Policía de Santa Fe $20.000.000 para que lo dejaran continuar su camino, a bordo de una camioneta Toyota Hilux blanca, en la que circulaba con su hijo de 12 años. La coima no encontró otra respuesta que las esposas.
Sucede que Tolosa, alias “Damasco”, fue capturado cerca de las tres de la tarde de este martes, en el cruce de las rutas 42S y 40S, a la altura de Gálvez. Estaba prófugo en una causa en la que fue sindicado como líder de una organización narco que operaba en la ciudad de Las Rosas, a 40 kilómetros del límite con Córdoba.
Lo buscaban desde el 28 de junio 2019, indicaron fuentes judiciales a Infobae.
Todos sus consortes en ese expediente fueron condenados. Faltaba él. Ahora se le sumó una imputación por resistencia a la autoridad y tentativa de cohecho.
De acuerdo a la información dada a conocer por el Ministerio de Seguridad provincial, una patrulla que realizaba un operativo cerrojo por una denuncia de estafa al estilo “cuento del tío”, notó que el conductor de una camioneta blanca con vidrios polarizados, frenó y comenzó a dar marcha atrás al advertir la presencia de los uniformados.
Ante la extraña maniobra, la policía comenzó una persecución a toda velocidad por caminos rurales de la zona que terminó a 14 kilómetros, cuando el conductor quedó incrustado en una cuneta.
Cuando bajó de la Hilux, Tolosa admitió que era buscado por la Justicia federal y ofreció a los agentes 20 millones de pesos para que lo dejaran irse junto a su hijo de 12 años, que viajaba junto a él.
Los efectivos corroboraron que sobre el hombre pesaba un pedido de captura con prohibición de salir del país y que era buscado por el Juzgado Federal 3 de Rosario, a cargo de Carlos Vera Barros. Lo apresaron y secuestraron el vehículo.
El detenido fue trasladado a la sede de los Tribunales Federales de Rosario, ubicado sobre el bulevar Oroño al 900, donde fue indagado por traficar con estupefacientes en forma organizada en carácter de organizador y de haber adquirido bienes con dinero de origen ilícito proveniente de las maniobras de narcotráfico.
La investigación por la que era buscado Tolosa comenzó en 2016 e intervino Claudio Kishimoto, a cargo de la Fiscalía Federal N°2 de Rosario, y Diego Iglesias, de la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR).
Los detectives estaban detrás de una banda que vendía droga en cementerios de Las Parejas, Armstrong y Las Rosas, en connivencia con funcionarios de la Policía de Investigaciones de Santa Fe, quienes prestaban protección y apoyo a la estructura narco. Por esa razón, le dieron intervención a Delitos Complejos de la PFA.
Con el tiempo, los agentes fueron develando el funcionamiento de la organización. Descubrieron así, la existencia de “los soldaditos de Damasco”, como llamaban a su platel de custodios narco, y a su sistema de “vendedores ambulantes”. También, anotaron sus reuniones de “negocios” en el bar “El Ruso”.
Según la investigación, contaba con la complicidad de su hermano Mauricio “Animal” Tolosa y usaba como centro de acopio y distribución la chacra “Don Miguel” (Las Rosas). Además, mantenía una sociedad delictiva con Gabriel “Peke” Machado. Recaudaban, en ese entonces, unos 300.000 pesos mensuales.
Tenían, además, testaferros para blanquear el dinero y se reconocían como proveedores de cocaína -que llegaba en vuelos clandestinos- del poderoso clan Gallardo. Machado murió en un accidente de tránsito el 21 de junio de 2018.
De acuerdo a la causa en su contra, “Damasco” -bajo la fachada de un empresario agrícola-ganadero, continuó en soledad el liderazgo del grupo narco compuesto, en gran parte, por su familia.