Cada dato cuenta y por eso la comunicación en las últimas horas de un fiscal del fuero juvenil con los investigadores del crimen de Umma Aguilera, la hija de 9 años de un custodio de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, asesinada en un intento de robo en Lomas de Zamora; los puso en alerta sobre una pista clave.
“Hubo muchos llamados al 911 avisando que uno de los sospechosos del crimen es un menor”, confiaron a Infobae fuentes del caso sobre el contenido del aviso que hizo el fiscal del Fuero de Responsabilidad Juvenil de Lomas de Zamora.
Según pudo saber este medio, los investigadores del caso, encabezados por el fiscal Pablo Rossi de la UFi N°18, creen que ese sospechoso tiene 17 años, o sea, que es “punible” e investigan si es hermano del prófugo que dejó su huella dactilar en el Toyota Corolla negro que robaron para emboscar a los padres de Umma en la puerta de su casa de Villa Centenario.
En paralelo, las fuentes también dijeron que el único detenido ya tiene abogados. Justamente, los letrados se presentaron ante el fiscal Rossi para avisarles que cuentan con testigos y filmaciones de cámaras de seguridad que mostrarían a Valentín García (22) en otro lado a la hora del crimen de Umma: o sea, aportaron una coartada.
“El fiscal ya dio el OK para que se produzca esa prueba que dicen tener los defensores de García”, ampliaron fuentes con acceso al expediente. Hay que recordar que el sospechoso de 22 años es el único detenido que tiene el caso y no es uno de los que se baja del Toyota Corolla, que habían robado minutos antes, para atacar a la familia y balear a Umma.
García fue imputado por el delito de robo agravado por el uso de arma (dos cargos, uno en grado de tentativa) y homicidio criminis causa (matar para ocultar otro delito), pero cuando estuvo ante el fiscal se negó a declarar.
García no tiene condenas, pero fue apresado e imputado en 2021 en una causa por robo agravado, detallaron fuentes de la investigación que encabeza la Policía de la Provincia de Buenos Aires y en la que colabora la Policía Federal, fuerza a la que pertenecen los padres de la menor asesinada.
Mientras tanto, siguen los operativos para dar con los tres prófugos. Uno de los allanamientos para ubicar al dueño de la huella dactilar hallada en el Toyota Corolla usado por los homicidas dio negativo. El hombre buscado es Miguel Pastor Romero Molinas, de 21 años, con antecedentes por encubrimiento en una causa de junio de 2022, y hurto, en un caso de mayo de 2023. Sería el hermano del menor que ahora aparece como posible sospechoso y ocupante del auto de los ladrones.
En tanto, por testimonios recabados y en base a las características físicas aportadas, los investigadores habían establecido la identidad de un tercer involucrado: Axel Emiliano “Pelusa” Rojas (20). Fue mencionado por dos llamados anónimos al 911. Del cuarto sospechoso del crimen de Umma se conocen sus apodos: “Barrita” o “Baltazar”.
El caso
El crimen se registró este lunes a las 8.48, cuando Eduardo Aguilera, policía vestido de civil, salía con Umma a bordo de su auto Ford Ka gris del garaje de su casa situada en Pío Baroja, a pocos metros del cruce con la calle París, de Villa Centenario.
Mientras la madre de la nena, María Eugenia Rodríguez Alvarez, cerraba el portón y el custodio aún no había llegado a tomar la calle, un auto Toyota Corolla negro que había sido robado minutos antes a otro vecino de la zona le interrumpió el paso y dos delincuentes bajaron armados y se aproximaron con intenciones de robo al conductor.
Aguilera aceleró para huir, momento en el que los asaltantes dispararon hacia la parte trasera del vehículo: allí iba Umma. La nena recibió un disparo en la nuca y en una de sus manos, por lo que fue primero trasladada de urgencia al hospital Gandulfo y luego derivada en un helicóptero al hospital Churruca, donde fue operada y murió horas más tarde.
Este martes, los restos de la nena fueron velados en Banfield y, luego, trasladados al cementerio de Lomas de Zamora: una caravana de autos y una multitud de policías, vecinos y allegados, que acompañaron a pie y en bicicleta, fueron los custodios del féretro las tres cuadras que duró el doloroso recorrido.
Luego, los vecinos marcharon a la comisaría 7ª de Villa Centenario para exigir Justicia y Seguridad.