Hace algunos días, tres hombres contrataron, mediante Booking, el alquiler temporal de un departamento dentro del country Hindú Club de Don Torcuato. Una vez instalados, en la tarde del viernes, decidieron convocar al lugar a Germán Sallemi, un joven empresario de 25 años dedicado al negocio de venta de dólares mediante Facebook. Aparentemente lo engañaron con la excusa de hacer una transacción. Lo cierto es que Sallemi fue encontrado estrangulado dentro de ese departamento.
Tal como publicó Infobae, la Policía Bonaerense y el fiscal Sebastián Fitipaldi realizaron anoche un exhaustivo análisis de distintas cámaras de seguridad. En algunas de ellas se ve al empresario llegar al lugar de su muerte, en otra se observa a los tres presuntos asesinos bajar las escaleras del lugar corriendo y en una tercera se visualiza a un Chevrolet Cruze, con patente adulterada, huir a toda velocidad.
Si bien la reconstrucción está en su etapa inicial, en las últimas horas la justicia detuvo al primer sospechoso, llamado Santino Marlo y de sólo 18 años. Si bien no es uno de los tres hombres que estaban en el lugar del crimen, se cree que es, como mínimo, un partícipe necesario.
La detención no se produjo en cualquier lugar, se llevó a cabo en el country Club de Campo San Diego, en Moreno. Del lugar, los efectivos se llevaron 1000 dólares, 25.000 pesos, mapas de Don Torcuato, las llaves del departamento de Hindú Club donde sucedió el hecho, un iPhone 11 Pro Max y Ford Focus blanco visto en las inmediaciones de la escena del crimen. Adentro del auto había bolsos con prendas de vestir y precintos plásticos.
“Cuando los sospechosos del homicidio llegan al lugar del crimen, en el Chevrolet Cruze con patente adulterada, lo hacen en compañía de otro vehículo que luego se va. Esto quedó registrado en las cámaras de seguridad. Ese auto que hizo las veces de acompañante, no está adulterado. Por lo tanto, mediante la patente llegamos el dueño”, explica una fuente del caso.
Hay varios detalles que todavía son un misterio en la incipiente investigación. El primero es determinar si el hecho fue premeditado. Todavía no queda claro si el alquiler del departamento temporal se realizó para cometer el crimen o si la operación era verídica y por alguna razón todo se precipitó.
En este punto, vale una aclaración. Dentro del Country del Hindú Club hay un edificio con departamentos que se utiliza para alquiler temporal. El crimen fue cometido en el quinto piso de esa edificación.
Con respecto a los tres sospechosos que estuvieron en el lugar, los investigadores creen tener identificado a, al menos, uno de ellos. Es quien realizó la reserva en la página de Booking. “Si bien lo hizo con datos adulterados, la foto del DNI coincide con las imágenes que tenemos. Hay una coincidencia que nos permite presumir que tenemos la identificación”, cuenta una fuente policial.
Sallemi está registrado como empresario en la AFIP, integrante de una firma familiar dedicada al negocio inmobiliario. Cuatro días atrás, había posteado su oferta de billetes de cara grande en el grupo de Facebook “Compra y venta de dólares Zona Norte”, de casi cuatro mil miembros, donde ofrecía entregas a domicilio. Posteaba con asiduidad en el grupo, ofrecía también comprar. El 6 de diciembre, por ejemplo, ofertó billetes a 970 pesos la venta.
En el expediente, manejado con celeridad en las primeras horas por Fitipaldi, todavía hay muchos puntos oscuros y que son misteriosos. ¿se trató de una emboscada o fue un negocio salió más y precipitó un crimen? ¿Por qué los asesinos eligieron a Sallemi? ¿Acaso se conocían de antes?. Todo está por resolverse.