A casi dos semanas del crimen de Tomás Tello en Santa Teresita, la Justicia avanza con la investigación contra los principales sospechosos. Sin embargo, los cinco nuevos detenidos se negaron a declarar, al igual que los demás arrestados.
Se trata de Lucas Carrillo, Alexis González, Dylan Damián Morel, Dylan Agustín Chávez e Iván Ezequiel Canaveri, quienes fueron detenidos el jueves por orden del juez de Garantías, Diego Olivera Zapiola, tras hacer lugar al pedido del fiscal que investiga el caso, Pablo Gamaleri. De esta manera, ya son 15 los aprehendidos por el crimen del joven de 18 años.
Según confirmaron fuentes del caso a Infobae, los nuevos arrestos se produjeron por distintos reconocimientos realizados en filmaciones tanto de cámaras de seguridad como de teléfonos que filmaron secuencias del hecho esa noche. También, fueron fundamentales los testimonios de personas que estuvieron tanto en la playa, donde comenzó el conflicto, como en el lugar del crimen.
La semana pasada, los dos menores originalmente detenidos por el crimen fueron sometidos a una rueda de reconocimiento en la ciudad de Dolores y no fueron identificados por los testigos, por lo que fueron liberados tiempo después.
“Los nuevos detenidos fueron mencionados por testigos hace semanas. Sin embargo, faltaban algunos elementos como para acreditar que realmente participaron del hecho. En los últimos días, estos elementos aparecieron y por eso se los detuvo”, explicaron.
De acuerdo con la información a la que pudo acceder Télam, el fiscal llevó adelante el viernes la audiencia indagatoria en contra de Carrillo, González, Morel, Chávez y Canveri, en la que los imputó como “partícipes necesarios” del homicidio, pero los acusados se negaron a declarar, tal como lo hicieron los demás detenidos.
Para el fiscal Gamaleri, ellos no fueron meros espectadores. “Tuvieron una participación activa en el hecho. Algunos atacaron a la víctima desde lejos con botellazos, otros evitaron que los amigos pudieran defenderlo”, aclara la misma fuente. Esta sería una mecánica similar al crimen de Fernando Báez Sosa.
De igual forma, solo cuatro de los 15 detenidos están imputados como coautores del homicidio, mientras que recae sobre los otros 11 la figura de partícipe necesario. Los principales acusados son Damián “El Kope” Kopelian, sindicado como el autor de la puñalada mortal, Federico Gonzalo Brandon, Roberto Nicolás de Jesús Ochoa y Carlos Amestoy, quienes, según Gamaleri, actuaron tras “urdir un plan de antemano con el fin de dar muerte” a la víctima, así como planteó que contaron con la colaboración del padre y el hermano del principal acusado.
El crimen de Tomás sucedió el 1° de enero a primera hora de la mañana. Tello fue emboscado a las 7.10 en el muelle de Calle 38, supuestamente por “El Kope”, Brandon, Ochoa y Amestoy. En ese momento, Tomás no estaba solo. Su primo, la novia de su primo y otras dos personas lo acompañaban, quienes declararon tras el asesinato que vieron cómo lo hostigaban.
Así, el fiscal pudo determinar que hubo dos secuencias: una en la playa y otra donde Tomás es asesinado. La primera sucede cuando los sospechosos lo increpan a él y las personas que lo acompañaban y los incitan a pelear. Así, comienza el enfrentamiento en la orilla del mar, cuyas imágenes fueron difundidas luego de conocerse el crimen. Allí, lo amenazaron por primera vez con un arma blanca.
La víctima huyó y los agresores los siguieron en patota hasta la calle 44 N°124, donde lo acorralaron en el pasillo de entrada de una vivienda y se turnaban para atacarlo a golpes de puntapiés, puños, piedras y botellazos en la cabeza y en el cuerpo. En ese momento, según el fiscal, Damián Kopelian le provocó “una herida fatal cortopunzante a la altura del esternón con un arma blanca”, mientras el resto continuaban golpeándolo.