El Tribunal Penal Colegiado N°1 de Mendoza le otorgó la libertad a Sandra Astudillo Stafollani, la ex empleada de la Legislatura provincial que contaba con prisión domiciliaria luego de haber sido incluida en la causa por abuso sexual y violencia de género que inició Verónica Macías Bracamonte en contra de su ex pareja, el comediante Cacho Garay.
La acusada había sido detenida el 13 de junio pasado en el Aeropuerto Internacional “El Plumerillo” de Mendoza después de que regresara de sus vacaciones en Cancún. Luego de que fuera aprehendida, la ex reina de la Vendimia fue trasladada al penal de mujeres hasta que fue beneficiada por la prisión domiciliaria. En paralelo, el humorista continúa detenido en el penal de San Felipe.
La liberación fue acordada por los jueces Eduardo Martearena, Mateo Bermejo y la conjueza Mónica Romero después de que recibieran un pedido de libertad por parte de los abogados de la imputada, Carlos Moyano y Nicolás Camani. El recurso fue presentado por los defensores después de que la denunciante ampliara su testimonial.
Según la información proporcionada por Télam, la mujer continuará imputada en la causa, pese al beneficio judicial que recibió. De esta manera, la ex empleada legislativa seguirá acusada como coautora del delito de abuso sexual con acceso carnal en número indeterminado de hechos cometidos en contexto de violencia de género.
La denuncia que presentó la ex esposa del comediante contra Astudillo Stafollani la implicaba como una de las personas que estaba a cargo de la organización de las orgías en las que aseguró haber sido abusada, debido a que en otras declaraciones señaló que su ex pareja la obligaba a participar de este tipo de actos.
En su momento, la ex funcionaria pública negó conocer a la denunciante, al igual que descartó haber participado de los encuentros íntimos que le atribuían haber organizado. No obstante fue detenida, luego de un allanamiento que fue realizado en el domicilio de la imputada.
Anteriormente, Macías Bracamonte había ratificado la denuncia en contra de su ex pareja y la ex reina de Vendimia en octubre de este año, en donde repitió los hechos que narró ante la fiscal a cargo del caso, Mónica Fernández Poblet, y los abogados Daniel Romero -defensor de Cacho Garay- y el representante oficial de Astudillo Stafollani, Carlos Moyano.
“Él me hacía participar de encuentros con otras mujeres, todo era sexo. Yo pensaba que ya me había acostumbrado y lo empecé a naturalizar”, contó la ex pareja del humorista en una entrevista para el programa Intrusos, por América TV.
En el caso de Cacho Garay, el humorista fue acusado de cometer los delitos de amenazas simples, amenazas agravadas por el uso de arma, coacciones simples, coacciones agravadas por el uso de armas, robo simple, tenencia ilegal de armas de fuego de uso civil (en tres hechos diferentes), abuso sexual con acceso carnal en un número indeterminado de hechos, abuso sexual doblemente agravado por ser con acceso carnal y por ser cometido por dos personas.
En paralelo, la situación procesal del humorista no definió si podrá recuperar el arresto domiciliario desde que volvió a ser encarcelado a principios de julio por haber transgredido la restricción perimetral que la Justicia le había otorgado para que evitara mantener contacto con la denunciante.
El pasado 12 de septiembre, el titular del Juzgado Penal Colegiado Nro. 1 de Mendoza, Federico Martínez, debía determinar si el humorista continuará alojado en el penal de San Felipe o si le concedía el beneficio de volver a cumplir con el arresto desde su domicilio. Finalmente, el juez dictaminó que continúe preso, mientras se desarrolla la investigación previo a que se celebre el juicio.