Malas noticias para el femicida Pablo Cuchán: le negaron el beneficio de la domiciliaria

El femicida Pablo Cuchán (45), que pasó 17 años en la cárcel por descuartizar y quemar a su novia adolescente en 2004, recibió en las últimas horas un nuevo revés por parte la Justicia de Bahía Blanca, que rechazó beneficiarlo con el arresto domiciliario en el marco de la causa por la cual está bajo arresto desde abril pasado, tras haber agredido a su ex pareja. De esta manera, seguirá preso.

En este expediente, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 14 de bahía Blanca que conduce el fiscal Marcelo Romero Jardín, Cuchán está imputado por el delito de “lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género en concurso real con amenazas en perjuicio de una ex pareja”.

Días atrás, su defensa solicitó la prisión domiciliaria con la excusa de que el acusado lo necesitaba para hacerse cargo de los cuidados que requiere su hermana, quien padece una discapacidad congénita.

Ante la presentación, la fiscalía sostuvo que el imputado no cumple con ninguno de los supuestos que prevé la ley para otorgar ese beneficio, como padecer una enfermedad terminal, ser mayor de 70 años o madre de un niño menor de 5 años o con discapacidad, entre otros.

Además, según adelantaron voceros del caso a la agencia Télam, todos los antecedentes de Cuchán se relacionan con la violencia contra la mujer y las normativas vigentes imponen que sea la propia Justicia la que proteja a la víctima cuando se vislumbra un riesgo.

A su vez, se indicó que Cuchán, en caso de ser condenado en la presente causa, deberá cumplir una pena de manera efectiva por ser considerado reincidente.

Planteadas las dos posiciones, finalmente el juez Correccional 1 bahiense, Gabriel Giuliani, resolvió no hacer lugar al pedido de la defensa.

La primera aparición en los medios de Cuchán fue en octubre de 2004, cuando asesinó, descuartizó y quemó en una parrilla a su novia adolescente, Luciana Moretti (15), en la localidad bonaerense de Ingeniero White. Por ese crimen, lo condenaron a 18 años de cárcel. Por entonces, el Código Penal no contemplaba el femicidio (fue incorporado en 2012).

Cuchán salió de prisión definitivamente el 24 de octubre del 2021. Sin embargo, en abril de este año lo volvieron a detener tras ser denunciado por la mujer con la que llevaba ocho meses de relación.

Los hechos por los cuales se encuentra bajo arresto ocurrieron en el interior de una vivienda del barrio Universitario de Bahía Blanca. Allí, el acusado forcejeó con quien por entonces era su pareja.

De acuerdo a la acusación, el 21 de abril el imputado ingresó al mismo domicilio, donde sujetó del cuello de la mujer con sus manos y le tapó la boca para impedir sus gritos, lo que le ocasionó lesiones de carácter leve. Según la fiscalía, en ese momento también amenazó de muerte a la víctima.

Tras ser detenido en el balneario de Monte Hermoso, Cuchán negó la acusación: aseguró ante la fiscal Marina Lara que no le produjo lesiones a la denunciante y que él no había cometido ninguno de los hechos que se le imputaban.

Al expediente de este caso se incorporaron certificados de lesiones constatadas por médicos forenses y de Policía Científica, además de fotos y declaraciones de un vecino.

Con todas esas pruebas, la fiscalía solicitó la elevación a juicio de la causa, en orden a los delitos de “lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género (dos hechos) en concurso real con amenazas”.

La Justicia finalmente dio lugar a ese requerimiento y fijó fecha para el inicio del debate: comenzará el 6 de febrero de 2024.