Tras las balaceras contra una sucursal bancaria y al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez que incluyeron amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro, se registró un ataque a tiros, en la Escuela Nº 63 “Almirante Guillermo Brown”, ubicada en Cochabamba al 5500, informaron fuentes policiales a Infobae.
De acuerdo a la denuncia, las autoridades del colegio llegaron esta mañana al establecimiento educativo y descubrieron las marcas de balas en el frente del edificio. Los investigadores deducen que los tiros habían sido efectuados “en horas de la noche”.
En la escena, la Policía secuestró 16 vainas servidas calibre 9 milímetros que serán enviados a peritar. En tanto, contaron 9 impactos de bala, detallaron investigadores.
“Escuché como cuatro tiros a eso de las 2, 2.30 de la mañana. Era tarde”, señaló una vecina Radio 2 sobre el ataque.
En tanto, Daiana Gallo Abrosis, de la Secretaría Territorial Educativa, del Ministerio de Educación provincial, confirmó, en diálogo con la prensa en la puerta de la institución, que “la escuela seguirá con sus actividades normalmente”. “Hay varios hechos que son respuestas a medidas del gobernador”, señaló la funcionaria que destacó la actuación de la comunidad educativa tras el hecho.
Se trata del tercer ataque registrado en 24 horas. Este martes por la tarde balearon el frente de la sucursal del banco Macro ubicado en Saavedra y Ovidio Lagos, y en la madrugada de este miércoles dispararon contra el acceso de la cale Vera Mujica del hospital de Emergencias Clemente Álvarez. En ambos hechos los sicarios dejaron notas con amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro. Las notas, escritas en cartones, estaban firmadas por presos que estarían alojados en el pabellón 9 de Piñero.
Tras las balaceras, este miércoles, el ministro de Seguridad Pablo Cococcioni brindó una conferencia de prensa desde la puerta de la seccional 32ª de barrio Godoy, en Granadero Baigorria, en la que se refirió a ambos episodios, a los que consideró una respuesta a las medidas tomadas en con la población carcelaria.
“De ninguna manera vamos permitir que unos criminales nos muevan ni un milímetro de las acciones estratégicas. Estas amenazas son claramente respuestas que estaban dentro de lo previsto porque el régimen penitenciario en estos cuatro años fue debilitando los controles internos, se disolvieron los grupos de requisas, y claramente cuando uno ajusta dos o tres parámetros básicos, la reacción se produce; pero vamos a responder con medidas más enérgicas todavía y vamos a darle seguridad a toda la provincia de Santa Fe”, dijo el funcionario.
Al mismo tiempo, detalló medidas inmediatas que comenzó a llevar adelante el Ministerio en las cárceles: operativos de cacheo, controles, requisas aleatorias en la vía pública, prohibición de entrada de elementos al servicio penitenciario, restricción de horarios de visitas, horarios de patios y comunicaciones y otros derechos reglamentarios de los reclusos.
“Son todas medidas que cuentan con el respaldo del gobernador Maximiliano Pullaro”, destacó. Y concluyó: “Nosotros vamos a adoptar todas las medidas necesarias para garantizar y recobrar la paz pública en Rosario y en la provincia de Santa Fe, y estamos preparados para reaccionar con medidas más enérgicas todavía”.
El Gobierno de la provincia comenzó este miércoles con el traslado de 86 presos que estaban en comisarías de Rosario a dependencias del Servicio Penitenciario, y a reforzar el patrullaje preventivo.
Con respecto a las custodias fijas, Cococcioni remarcó que “se están ejecutando las medidas anunciadas, y a partir de hoy a las 7, se levantaron 30 custodias fijas que estaban dispuestas por orden judicial y orden administrativo con lo cual se ha visto reforzado el patrullaje preventivo que era muy escaso y se restablecieron los servicios policiales para cooperar en este proceso”.