Cuatro delincuentes se tirotearon con el custodio de un juez federal cuando intentaron robar una camioneta marca Audi que se encontraba estacionada en la puerta de la vivienda del funcionario judicial del barrio de Parque Leloir, ubicado en el partido bonaerense de Ituzaingó. Uno de los sospechosos fue detenido en un hospital de Moreno. Se investiga si el objetivo de la banda era ingresar al domicilio del magistrado.
El intento de robo y tiroteo ocurrió el último viernes por la noche, pero trascendió este domingo, según reporta la agencia de noticias Télam.
Cuatro delincuentes que se trasladaban en un auto de marca Peugeot intentaron robar una camioneta Audi que estaba estacionada en la puerta de la casa del juez federal. Según indicaron fuentes del caso, un agente de la Policía Federal Argentina (PFA) que se encontraba en el lugar custodiando la vivienda del magistrado observó la secuencia, se identificó como oficial y fue entonces que comenzó un breve tiroteo con al menos dos de los ladrones.
El agente resultó ileso mientras que la banda huyó. Las fuentes consultadas indicaron que, al menos, uno de los asaltantes recibió un disparo. Justamente, uno de los sospechosos heridos luego fue detenido en un hospital de la localidad de Moreno al que fue atenderse.
En tanto, los investigadores continúan trabajando para identificar al resto de la banda. En ese contexto, se realizaron diferentes allanamientos en distintos puntos de la zona Oeste del conurbano bonaerense.
Los investigadores intentan determinar si los delincuentes tenían como objetivo ingresar a la casaquinta del funcionario judicial, que fue identificado por portales La Ciudad Web y No Ficción Web como el juez federal de Morón, Jorge Rodríguez, quien se encontraba realizado una celebración con familia y amigos en ese momento.
La causa es investigada por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Ituzaingó del departamento judicial de Morón, a cargo del fiscal Patricio Ventricelli.
Un barrio de casos resonantes
A 10 cuadras de donde ocurrió el tiroteo este viernes, el 25 de julio pasado un caso causó conmoción entre los vecinos: Nancy Yanina Gotta (41) fue asesinada de 22 puñaladas por su ex pareja el complejo 3 de Leloir Plaza, ubicado en las calles Martín Fierro y Del Cielito.
Luego, el femicida intentó arrojarse al vacío, aunque fue reducido y detenido por la Policía Bonaerense en la terraza del mismo edificio comercial donde ocurrió el crimen. “Siniestro”, fue la palabra que usó uno de los investigadores para definir la impresión que le dejó José Castillo Corvalán (37).
Nancy era madre de dos hijos, vivía en Hurlingham y se había separado de Castillo Corvalán tres meses antes del crimen. Tras el femicidio, se supo que ella lo había denunciado en cuatro oportunidades por violencia de género y que el detenido tenía una perimetral que le prohibía acercarse a la víctima: el Juzgado de Familia N°8 de Morón le había dictado el 30 mayo pasado una medida de restricción de acercamiento.
Una compañera de trabajo de Nancy dijo que el femicida rompía la restricción perimetral, ya que ambos eran empleados en distintos espacios de ese complejo de Parque Leloir: “Todos los días estaba a 20 o 30 metros de distancia de ella”. Incluso aseguró que estaban al tanto de las situaciones de violencia que la víctima sufría. “Ya le había pegado muchas veces y toda la gente que trabaja acá ya sabía de esto. Todo el mundo sabía que la maltrataba”.