En medio de una recorrida por el norte de la ciudad de Mar del Plata, un grupo de agentes de la DDI local de la Policía Bonaerense observó a un hombre en una situación extraña: perseguía de manera sospechosa a dos niños que caminaban en medio de una avenida.
Los agentes no tuvieron dudas de que sus intenciones eran oscuras. No se equivocaron: cuando fue detenido -después de forcejear violentamente con él-, los policías descubrieron que, además, el Departamento Judicial de San Martín lo buscaba desde mayo por abusar de su propia hija, también menor de edad.
El arresto se produjo sobre la avenida Coelho de Meyrelles al 5900, en el barrio El Grosellar. Según confirmaron fuentes judiciales de Mar del Plata a Infobae, el procedimiento lo llevaron a cabo oficiales del Gabinete de Delitos Sexuales, quienes al ver la situación le dieron la voz de alto. Sin embargo, el sospechoso -un hombre de 47 años- quiso escapar pero, al verse rodeado, se resistió de manera violenta.
Así, atacó a los policías a golpes de puño, patadas y cabezazos. Incluso, trató de robarle el arma a uno de los agentes. Finalmente, fue reducido y detenido.
La Policía hasta ese momento estaba asombrada por la reacción desmedida del hombre. Después, al descubrir sus antecedentes, todo quedó explicado.
De acuerdo con fuentes judiciales de San Martín consultadas también por este medio, al hombre le venían pisando los talones tras una intensa investigación llevada adelante por la UFI Nº14, especializada en delitos contra la Integridad Sexual, que incluyó varios allanamientos tanto en el Conurbano como en la ciudad balnearia.
La causa por la que lo buscaron durante los últimos seis meses comenzó a tramitar en diciembre de 2020. La acusación es aberrante: corrupción de menores agravada por el vínculo y por la edad de la víctima en concurso real con abuso sexual agravado por el vínculo, reiterado en al menos dos oportunidades. Además se lo imputó por abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por el vínculo reiterado en al menos dos oportunidades; abuso sexual con acceso carnal por actos análogos agravado por el vínculo reiterado en al menos dos oportunidades y tentativa de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.
La víctima del pedófilo era su hija, cuya edad al momento de los hechos no trascendió. Sólo se supo que era menor de edad. El nombre del acusado es mantenido en reserva en esta nota para no exponer a su víctima.
En el marco del expediente, el 9 de mayo de este año se hizo un allanamiento en una casa de la localidad de Caseros, partido de Tres de Febrero, pero no se lo encontró. Fue por eso que desde ese momento, se lo consideró prófugo y la UFI Nº14 requirió una orden de captura.
La Fiscalía continuó con la investigación y tras varios meses, obtuvieron el dato de que podría estar oculto en Mar del Plata. De hecho, las autoridades llevaron adelante allanamientos en esa ciudad, sin poder capturarlo. Lo que no imaginaron, aseguran los investigadores, es que iban a atraparlo por casi cometer el mismo delito por el que lo buscaban.
A raíz de la detención, se formó un nuevo expediente en la UFI de Flagrancia de Mar del Plata, a cargo de la fiscal Mariana Baqueiro, quien ordenó su traslado a la Unidad Penal Nº 44 de Batán. El delito que se agregó es el de resistencia a la autoridad.
Por estas horas, la Justicia marplatense completa los trámites de rigor para indagarlo por la causa en la que agredió salvajemente a los agentes policiales. Luego, con el aval de la jueza Elena Gabriela Persichini Marco, será trasladado a San Martín para responder por el presunto abuso a su hija.