Hoy por la mañana, la División Homicidios de la Policía Federal detuvo a otros tres policías acusados de encubrir el asesinato y desaparición de Lucas Escalante y Lautaro Morello. Los efectivos, detenidos en Florencio Varela, se encuentran vinculados al comisario mayor Francisco Daniel Centurión, ex responsable del área de enlace de Interpol con la Policía Bonaerense y el principal implicado en la causa, envuelto en una tramoya sucia de tickets de combustible de patrulleros que terminó en un cadáver incinerado y un chico desaparecido. Por el caso, también están presos su hijo Cristian y su sobrino Maximiliano.
Los efectivos detenidos son los subayudantes Damián Rodríguez y Juan Brito. También se arrestó al oficial Ramiro Yair Forchinito, que funcionaban como chofer y asistente de Centurión. La calificación en su contra es la de encubrimiento calificado por el hecho precedente, un delito especialmente grave, y por su condición de funcionario público, con un expediente bajo la firma del juez Diego Agüero. Se sospecha que, entre otras maniobras, habrían hecho desaparecer pruebas. Todos los acusados fueron encontrados en sus casas y no se resistieron al arresto.
Forchinito ya había sido detenido en abril, acusado de falso testimonio porque le entregó a la Justicia un celular que no le pertenecía en vez del suyo. El juez Agüero había resuelto liberarlo bajo caución juratoria, confirmaron fuentes del caso a Infobae. Ahora, se volvió a arrestarlo y se secuestró su celular nuevamente. El área de Asuntos Internos de la Policía Bonaerense colaboró en los procedimientos.
El caso
Lautaro Morello (18) y Lucas Escalante (26), salieron a bordo del BMW de Escalante desde Florencio Varela el 9 de diciembre pasado. El cadáver de Morello fue hallado incinerado seis días después en el Camino del Buen Ayre. Lucas sigue desaparecido hasta hoy. Se cree que Lucas sufrió una muerte violenta luego de haber pasado “al menos más de un mes” privado de su libertad por los Centurión. La muerte de ambos ocurre luego de que, supuestamente, Cristian Centurión, el hijo del comisario, les iba a entregar vales de nafta de policía, un robo a la caja chica de la Bonaerense orquestado por el comisario mayor.
En el medio, algo salió horriblemente mal. Se cree que el comisario se sumó posteriormente al plan de su hijo y su sobrino.
Los primos Cristian y Maximiliano fueron detenidos tras el análisis de cámaras de seguridad y de antenas de telefonía celular. En una grabación de una estación de servicio de Florencio Varela se ve al hijo del comisario cerca de las 0.30 del 10 de diciembre cargando nafta en un bidón blanco que, se sospecha, pudo haber sido empleado para incinerar el auto de Lucas y el cadáver de Lautaro.
El comisario Centurión, por lo pronto, está detenido por los delitos de sustracción de caudales públicos en concurso real con privación ilegal de la libertad agravada por haber durado más de un mes y por ser cometida con violencia.
Daniel García, jefe máximo de Centurión y de la Policía Bonaerense, declaró como testigo en el expediente. El fiscal Daniel Ichazo continúa con el expediente y con esfuerzos para encontrar el cuerpo de Lucas.