La Policía Federal Argentina llevó hoy a cabo una serie de allanamientos en la ciudad de Rosario y desmanteló un sofisticado vivero que era regenteado por un ingeniero industrial y su hermano y que estaba destinado a la siembra de cannabis de diferentes especies y venta de cogollos de marihuana con alta concentración de THC. Funcionaba en un galpón de casi 300 metros cuadrados con una infraestructura y tecnología de punta, señalaron fuentes policiales a Infobae.
Los procedimientos fueron realizados en el marco de una investigación que comenzó hace tres meses y está encabezada por la Fiscalía Federal N°3 rosarina a cargo Adriana Saccone, con intervención del Juzgado Federal N°4 del mismo distrito que conduce el juez Marcelo Bailaque.
El vivero se ubicaba en un domicilio del barrio República de la Sexta. De acuerdo a las fuentes, contaba con cámaras de seguridad, extractores de aire industriales, aireadores que se proyectaban al techo simulando chimeneas, sistemas electrónicos de ventilación, control automático de temperatura ambiente, riego, aires acondicionados, ventiladores especiales, iluminación específica y gran cantidad de nutrientes químicos y fertilizantes de todo tipo. “Todo esto generaba un microclima ideal para la siembra y cosecha de marihuana”, apuntaron a este medio.
El lugar era supervisado por un “jardinero 24/7″ que seguía instrucciones de su jefe, precisamente el ingeniero rosarino detenido, a quien se señala como el ideólogo y dueño del vivero y de la plantación. “Volcaba todos sus conocimientos profesionales para lucrar con la venta de ‘los mejores cogollos del país’, según dijo al ser detenido”, detallaron desde la investigación, que estuvo a cargo de la División Antidrogas Rosario de la PFA.
Los allanamientos también tuvieron lugar en domicilios del barrio Martin, a metros del Monumento a la Bandera. En los operativos fueron detenidos el propietario del lugar, su hermano y otro hombre. Además, los policías secuestraron 572 plantas de marihuana florecidas, 14 kilos de cogollos de marihuana (cuyo valor en el mercado de menudeo —y de a 25 gramos tal como las vendían— supera los 35.600.000 de pesos), 4 kilos de hojas de marihuana, aceite de cannabis, dinero en efectivo, 2 pistolas de grueso calibre, 1 escopeta táctica, vehículos de alta gama y una lancha, al margen del intrincado sistema de invernadero del tipo “inn-door” con tecnología de última generación.
Según las fuentes, el ingeniero sospechoso y su hermano —que es contador— “habían pensado en absolutamente todo para montar su negocio y maximizar rentabilidad”, utilizando además como cobertura la inscripción al Registro Nacional de Pacientes en Tratamiento con Cannabis (REPROCANN) e invirtiendo una suma multimillonaria en la instalación del invernadero escondido dentro del galpón, donde se dedicaban a sembrar, cosechar, seleccionar, procesar y distribuir en modalidad delivery aceite de cannabis y cogollos de marihuana.
Los detenidos serán indagados en las próximas horas.
A mediados de 2021, la PFA había allanado otro depósito en Rosario donde incautaron 300 plantas de marihuana y numerosos artefactos utilizados para el cultivo en interior a gran escala. En ese caso fue en el barrio Villa Moreno e intervino la Fiscalía Federal N°2 a cargo de Claudio Kishimoto.
Esa investigación determinó la existencia de una sociedad ilícita de al menos tres personas con roles bien definidos: un encargado del cultivo con el conocimiento en la materia, que solicitaba los agroquímicos y compraba semillas en el exterior; una persona que además de aportar dinero comercializaba lo obtenido de la empresa criminal; y un financista afín al mundo de los negocios en Rosario, quien habría gestionado el alquiler del galpón, manejaba los papeles y buscaba posibles inversores. Un cuarto sospechoso prestaba asesoría y servicios contables.
Posteriormente, en marzo del año pasado, fueron detenidos tres acusados, en el marco de cuatro allanamientos en Rosario, Ibarlucea (Santa Fe) y General Alvear (Mendoza).