Habló la viuda de Andrés Blaquier tras el veredicto y pidió cadena perpetua para los motochorros

Magdalena De Elordy asistió a la última audiencia del juicio contra los dos adolescentes de 17 años encontrados culpables de matar a su marido. “Fue un año difícil”, afirmó

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Magdalena De Elordy, viuda de
Magdalena De Elordy, viuda de Blaquier (Adrián Escandar)

Magdalena De Elordy, la viuda de Andrés Blaquier, habló tras la lectura del veredicto del juicio contra los dos adolescentes de 17 años que fueron encontrados culpables por el homicidio de su esposo y pidió para ellos “la mayor condena posible, perpetua”. Sucede que, al ser menores de edad, aún queda un paso para conocer la pena que deberán cumplir, un proceso de cesura que, estiman fuentes de la causa, podría realizarse en un año.

De Elordy, que iba en la moto BMW en la que se desplazaba el empresario cuando fue interceptado y baleado por los ladrones, afirmó a la prensa: “Fue un año difícil, de espera, pero siempre confiados en que la Justicia haga su trabajo”, dijo la viuda y víctima del mismo asalto, en el que sufrió la fractura de la rótula de su rodilla izquierda, a causa de la caída, en declaraciones citadas por Télam.

El veredicto de culpabilidad fue dado a conocer poco antes del mediodía en la sede del Juzgado de Responsabilidad Penal Juvenil 1 sanisidrense, situado en avenida 12 de Octubre 1475, donde la familia Blaquier llegó acompañada por allegados y amigos, como en cada una de las audiencias de debate.

Antes del veredicto, familiares y
Antes del veredicto, familiares y allegados pidieron justicia (Adrián Escandar)

El Tribunal de Responsabilidad Penal Juvenil 1 de San Isidro halló a los dos jóvenes responsables de los delitos de “robo agravado por el uso de arma apta para el disparo en concurso real con homicidio criminis causae agravado por el uso de arma de fuego” de Blaquier

Los condenados son dos primos que llegaron al juicio alojados en distintos institutos de menores de la provincia de Buenos Aires. Durante los alegatos ante el Tribunal -integrado por los jueces Alejandro Flori, Silvia Chomiez y Patricia Klentak- la fiscal del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de San Isidro, Paula Romeo, sostuvo que los dos imputados son culpables ya que tuvieron un “codominio funcional” de lo ocurrido, por lo que pidió que cuando cumplan la mayoría de edad sean alojados en una unidad penal.

El mismo pedido hizo Ramiro Salaber, abogado de la familia de la víctima. Los jueces aceptaron el pedido de la acusación y ordenaron que el mismo día que cumplan 18 años, sean enviados a una prisión de jóvenes adultos. El primero en hacerlo será el conductor de la moto con la que interceptaron al empresario. El mayor de los menores condenados cumplirá la mayoría de edad en un mes.

En diálogo con Infobae, Salaber indicó que la lectura del veredicto se realizó con tranquilidad. “Era lo que esperábamos porque las pruebas eran muy claras”, señaló. “La familia sigue terriblemente dolida. Esto es como un vaso en el desierto para ellos”, reveló sobre el estado de ánimo de los allegados al empresario asesinado.

La concentración en la puerta
La concentración en la puerta del Juzgado espera el veredicto (Adrián Escandar)

El debate, que comenzó el pasado 18 de septiembre, se desarrolló a puertas cerradas debido a que los imputados son menores. Según las fuentes, durante las audiencias se exhibieron una serie de pruebas que complicaron la situación de los adolescentes.

Una de ellas fue un audio enviado por la madre de uno de los sospechosos cuatro horas después del crimen de Blaquier, en el que refería que su hijo le había confesado haberle disparado a otra persona.

También se analizaron los peritajes realizados sobre los teléfonos de los adolescentes y las declaraciones de las novias de los imputados, de lo que surgió que los sospechosos obtenían diferentes motocicletas de procedencia desconocida y presumiblemente robadas.

Por otro lado, en el juicio se reprodujeron los llamados al 911 que realizaron testigos presenciales del hecho y se mostraron las imágenes de las cámaras de seguridad de la autopista Panamericana, las cuales lograron reconstruir el recorrido de 10 kilómetros que realizaron los ladrones antes de interceptar a la víctima en una motocicleta Kawasaki verde y negra, para luego escapar en dirección al barrio Cri-Cri, de Garín, partido de Escobar, de donde son oriundos los dos sospechosos.

Otra de las pruebas destacadas por el Ministerio Público fueron las heridas que sufrió uno de los acusados el día del hecho, cuando se presentó en el hospital Dupuy, de Garín, con lesiones en el rostro y escoriaciones en ambas rodillas y en sus manos, las cuales la querella y la fiscalía consideran compatibles con un accidente de moto como el que tuvo el acusado de caerse de a moto de Blaquier sobre la Panamericana.

Andres Blaquier
Andres Blaquier

El crimen de Andrés Blaquier

El crimen del empresario ocurrió el 29 de octubre de 2022 a las 18.54, cuando Blaquier circulaba por el carril lento del kilómetro 50 de la Panamericana, en la zona norte del Gran Buenos Aires, junto a su esposa, De Elordy, en una moto BMW 1200 de color negro, en sentido a provincia.

El empresario fue abordado por dos delincuentes que iban en una moto verde y negra modelo Kawasaki Z400, que le cortaron el paso y luego le dispararon en el pecho con una pistola calibre 9 milímetros con fines de robo.

El video del crimen de Andrés Blaquier

Como consecuencia del disparo, cayeron de la moto Blaquier y De Elordy, mientras que el ladrón que disparó el arma de fuego se subió a la moto BMW 1200 y se fugó a bordo de ella, aunque a 10 kilómetros del lugar del crimen cayó del vehículo y lo dejó abandonado sobre el asfalto.

El empresario fue asistido por una ambulancia, pero llegó fallecido al hospital, luego de sufrir “shock hipovolémico”, a causa del balazo que recibió en la parte izquierda de su tórax, el cual le provocó una hemorragia masiva al presentar perforaciones en las pleuras y sus ventrículos izquierdo y derecho del corazón, según indicó el informe de autopsia.

El 8 de noviembre del año pasado, luego de una serie de tareas de investigación que situaban a los dos adolescentes en la escena del crimen, se ordenaron varios allanamientos en viviendas de la localidad bonaerense de Garín, donde fueron detenidos.

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