La fiscal Marcela Sánchez investiga la trágica muerte del chico de 13 años que cayó de un décimo piso de un edificio del barrio porteño de Palermo. Si bien el hecho ocurrió recién ayer en horas de la tarde, los investigadores ya obtuvieron pistas que podrían aportar información sobre lo que ocurrió.
Según indicaron hoy fuentes oficiales a Infobae, una revisión de la escena en el departamento de la torre Bellini reveló que la puerta del balcón desde el cual creen que el adolescente cayó estaba cerrada, con la llave puesta del lado del balcón, es decir, desde adentro. Además, los peritos observaron que la red de protección para niños que estaba instalada se encontraba cortada en uno de sus laterales.
Según los primeros testimonios a los que accedió la Policía de la Ciudad, el chico estaba acompañado por su histórica niñera, la última persona en verlo con vida.
La calificación del hecho, por ahora, es la de averiguación de causales de muerte. La investigación recién comienza. En el lugar, además de la Fiscalía N°30 que encabeza Sánchez, trabajaron peritos de la Unidad Criminalística Móvil, que constataron, en un primer análisis, que el cuerpo no tenía heridas defensivas que indiquen un ataque previo, algo que deberá corroborarse en la autopsia
Ayer, a las 17:50, tras un llamado al 911 que alertó sobre la tragedia, personal de Bomberos de la Ciudad se desplazaron hasta la torre. El llamado afirmaba que una persona había caído desde la altura.
“El menor se halló a 20 metros del ingreso, en un patio a cielo abierto”, explicaron fuentes del caso sobre la alerta original. Luego, llegaron los agentes de la Comisaría Vecinal 14-C de la Policía de la Ciudad y, enseguida, la asistencia médica. “Una ambulancia del SAME que asistió para auxiliar a la víctima constató su fallecimiento”, indicaron.
Otro dato que se conoció ayer apenas ocurrió el hecho es que, al menos en un primer análisis, “no constataron signos de violencia”. La fiscal dispuso toma de testimonios a vecinos o posibles testigos, un levantamiento de rastros y la autopsia al cuerpo. Pasadas las 20 de ayer miércoles, el cuerpo del chico fue trasladado a la Morgue Judicial porteña. El resultado preliminar del estudio se conocerá después del mediodía de hoy.
Una tragedia que se evitó en Rosario
El viernes pasado, en la ciudad de Rosario, un niño pasó la baranda y la red de contención colocada en el balcón de su departamento y quedó colgando desde el octavo piso de un edificio. Los videos del rescate fueron dramáticos.
De acuerdo a la información consignada en medios locales, se trataba de un chico de 11 años que vive con autismo y que había logrado romper la red, quedando atrapado del otro lado.
La secuencia fue alertada por su hermano mayor, que lo vio desde adentro de la casa y rápidamente salió a asistirlo. Sin embargo, no podía hacer más que sujetarlo. Desde la vereda, en tanto, un grupo de personas ya se habían acumulado en la zona para ver lo que sucedía.
Estas personas no reaccionaron frente al episodio, a excepción de dos repartidores de cerveza, que, frente a la situación, frenaron el camión en el que se estaban trasladando para trabajar y sin dudarlo se bajaron a ayudar.
Los dos repartidores entraron al edificio y subieron hasta el octavo piso, donde comenzaron a golpear todas las puertas hasta dar con la del departamento en la que estaba el chico. Así, rompieron la puerta, entraron y cortaron la red. Con el agujero hecho, uno de los repartidores se colocó boca abajo y extendió los brazos para sostener al niño. Así, lo salvaron.