Un fiscal pidió la pena de prisión perpetua para el carnicero que confesó este lunes su participación en el homicidio del empresario español de Roberto Fernández Montes, cometido en 2017 en Caballito. El acusado, de nacionalidad paraguaya, quedó filmado, junto al yerno de la víctima, cuando bajaba el cadáver por el ascensor envuelto en un cubrecama.
En su alegato ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 5 de la Capital Federal, el fiscal de juicio Juan Manuel Fernández Buzzi pidió la pena máxima para Pedro Ramón Fernández Torres (57), alias “El Carnicero”, como coautor de un “homicidio agravado por alevosía”, quien logró permanecer cinco años prófugo antes de ser detenido.
Ante los jueces Cintia Oberlander, Alejandro Nocetti y Juan Manuel Grangeat, el fiscal dio por probado que “el 21 de enero de 2017 entre las 12.10 y las 13.31″, tanto el imputado como Santiago Corona (41) - exyerno de la víctima ya condenado a perpetua -, “dieron muerte” a Fernández Montes (67) dentro de su departamento del quinto piso del edificio de la calle Aranguren 36 de Caballito, en el marco de un “plan criminal previamente acordado”.
El fiscal destacó como evidencia fundamental los videos de las cámaras de seguridad del edificio que los imputados creyeron que no funcionaban. En las imágenes se los ve bajando con el cadáver envuelto en sábanas y un acolchado ensangrentado, y trasladándolo hasta el garaje, para ponerlo en el baúl del auto que usaba la víctima y con el que los asesinos escaparon con el cuerpo.
En su exposición, Buzzi aseguró que al haber negado su participación en el asesinato “mintió” con el objetivo de “mejorar su situación procesal” y que solo lo condenen por un robo.
Sucede que el Fernández Torres admitió que había participado en el crimen, pero aseguró que fue al departamento engañado por el yerno del empresario, Santiago Corona, para cometer un robo. Según su versión, Corona apuñaló a su suegro por la espalda, en un acto que no se esperaba.
Sin embargo, Buzzi no le creyó. “Dijo que lo ayudó a sacar el cuerpo porque Corona lo amenazó, que sabían dónde iban sus hijas al colegio y se sintió intimidado. Pero en el video que pudimos ver no se lo ve ni nervioso ni intimidado, ni asustado. Se lo ve con la misma atención y tensión que tiene Corona”, señaló el fiscal.
Además, destacó que la autopsia descartó que Fernández Montes haya sido asesinado a puñaladas, como sostuvo el acusado. El médico forense que hizo la autopsia declaró en el juicio que en los escasos y calcinados restos que quedaron de la víctima no se advertían “heridas penetrantes” y que la principal hipótesis sobre la causa de la muerte del empresario era la de “una asfixia mecánica”.
A su vez, el representante del Ministerio Público Fiscal consideró que, más allá de quién cometió la ejecución del asesinato, tanto Corona como Fernández Torres tuvieron “el codominio del hecho”.
“Había un plan en el que intervinieron estas dos personas y cada uno tenía un rol”, argumentó Buzzi sobre la coautoría del carnicero.
Sobre la calificación penal indicó que se trataba de un “homicidio agravado por alevosía” al considerar que en este hecho se aprovecharon “del estado de indefensión de la víctima” y lo “mataron sobre seguro”, al actuar con “ocultamiento y acecho” y de un “modo traicionero”.
En tanto, la defensa alegó este miércoles que el carnicero “solo acompañó a la víctima al cuartito”, donde lo encerró hasta que llegó el yerno de la víctima.
“Se lo ve a Corona con guantes es porque fue preparado”, argumentaron los abogados Sofía Lanzilotta y Ramiro Dillón, para quienes Fernández Torres fue “a robar, engañado y usado como chivo expiatorio” por quien consideran como el verdadero homicida.
En su alegato, la defensora hizo mención al documental sobre el crimen de Pedro Rodríguez, el policía español que fue hallado incinerado dentro de su auto y por el que fue condenada su pareja, Rosa Peral, también miembro de la Guardia Urbana.
Lanzilotta recordó un fragmento de la serie en la que aseguran que “la mejor manera de deshacerse de un cuerpo es quemarlo” para referirse a la premeditación de Corona en el homicidio y en referencia al modo en el que fue hallado el cuerpo: calcinado dentro de su vehículo, abandonado en Esteban Echeverría.
“Quería descargar la culpa en otro”, dijo sobre las supuestas intenciones del yerno de la víctima contra el carnicero.
Según la defensa, Fernández Torres “no pudo hacer otra cosa que colaborar para sacar el cadáver por las amenazas”. De acuerdo a la confesión del acusado, Corona le dijo que mataría a sus hijas si no accedía a trasladar el cuerpo.
Por último, sus abogados pidieron la absolución por el homicidio y solicitaron que se lo condene solo por el robo.