Una mujer de 83 años fue hallada el mediodía de este martes asesinada en el interior de su casa de la ciudad bonaerense de Pehuajó y por el crimen detuvieron a su hijastra, quien estaba con ella en la vivienda en ese momento.
El caso se disparó a raíz de una llamada cerca de las 12.30 al servicio local de emergencias médicas. Desde la casa donde residían ambas mujeres, ubicada en la calle Leandro N. Alem 118, entre Zuviría y Godoy, pidieron una ambulancia para asistir a la jubilada.
Personal de salud se acercó hasta el lugar, pero allí se encontró con un cuerpo con signos de violencia y una escena presumiblemente homicida: la víctima, identificada como María Ester Suquía, estaba sin vida en una habitación, recostada boca arriba sobre una cama de una plaza, con parte de su rostro cubierto con una bolsa de plástico y un pañuelo en su boca.
Ante esta situación, los médicos que concurrieron al domicilio notificaron a la Policía y minutos más tarde al lugar llegaron agentes de Científica y de Criminalística.
Junto a Suquía se encontraba su hijastra, llamada Graciela Emilce Rubini, de 47 años. Ella “manifestó en primera instancia que creía que se trataba de un suicidio” y recordó que la jubilada en otra ocasión había intentado quitarse la vida, según reveló en una conferencia de prensa el comisario de Policía Comunal, Cesar Arbizu.
“Me refirió que en esa oportunidad estuvo internada durante un tiempo en un hospital y por decisión de ella misma fue que le dieron el alta a Suquía, y continuó a su cuidado”, agregó el jefe de la fuerza. Aquella internación fue constatada con declaraciones que se le tomaron a vecinos y otras personas del entorno de la víctima.
Sin embargo, tras las primeras investigaciones “surgieron indicios que daban a entender que esta persona (Rubini) podría tener algún tipo de participación en el hecho, por lo que quedó aprehendida por el delito de homicidio calificado”, comunicó Arbizu.
El caso está en manos del fiscal Luis Caldentey, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°7 descentralizada en Pehuajó, del Departamento Judicial Trenque Lauquen. Los investigadores observaron que en la casa no había faltantes, ni desorden o aberturas violentadas, por lo que la hipótesis del robo fue descartada. “A la hora que llegamos al lugar, ambas personas estaban con ropa de cama”, acotó Arbizu.
El fiscal ordenó la autopsia correspondiente para establecer fehacientemente las causas de la muerte. Fuentes del caso, por otra parte, le aseguraron a Télam que en un momento Rubini confesó el crimen y les dijo a los policías que estaba “harta” de atender a la jubilada porque estaba postrada y con graves problemas de salud. Si bien esta versión no fue confirmada por Arbizu, el comisario dejó entrever en el diálogo con la prensa que al costado del cuerpo de la víctima “había un almohadón que se investiga si pudo haber sido utilizado como mecanismo de asfixia para provocar el deceso”.
Por estas horas los investigadores procuran determinar si Rubini sufre de algún trastorno psicológico. Por lo pronto, quedó alojada en el área de salud mental del hospital con custodia policial. El comisario deslizó algo de su actitud que le llamó la atención: “No estaba shockeada”.
La sospechosa será indagada mañana por Caldentey.