El condenado y temible jefe narco René “Brujo” Ungaro fue imputado este jueves como el presunto instigador del doble crimen de la bailarina Virginia Soledad Ferreyra y de su madre, Claudia Mercedes Deldebbio, ocurrido en un ataque a tiros que tuvo lugar el 23 de julio del año pasado en Maestros Santafesinos e Ísola, en la zona Sur de Rosario. Se presume que, de acuerdo a la investigación, pagó 60 mil pesos por ese hecho.
Además, a Ungaro se lo acusó de haber planificado la balacera del 4 de septiembre de 2022 contra el Centro Municipal de Distrito Sur “Rosa Ziperovich”, donde el sicario dejó una nota dirigida al líder de Los Monos, Ariel Máximo “Guille” Cantero.
Los fiscales que imputaron a Ungaro (36) fueron Patricio Saldutti, de la unidad de Homicidios Dolosos, y Franco Carbone, del Equipo de Abordaje de hechos cometidos con armas de fuego. También llevaron al banquillo de los acusados a Nicolás “Cara de burro” Martínez (25), el otro presunto instigador de los ataques, y a Fernando Cortez (45) y su hijo, Lautaro (20), quienes fueron imputados por haber participado en el doble homicidio.
Según la atribución formulada por Saldutti, Ungaro, que en julio del año pasado estaba alojado en el penal federal de Ezeiza, le encomendó a Nicolás Martínez –preso en la cárcel de Coronda, sospechado de haber sido uno de sus gatilleros– que organice un ataque a tiros en el complejo Fonavi del barrio Parque del Mercado. El funcionario del Ministerio Público de la Acusación agregó que el jefe narco ofreció pagar 30 mil pesos por cada persona que falleciera en esa balacera.
“Cara de burro”, a criterio del fiscal, se comunicó con Fernando Cortez y su hijo Lautaro y otras tres personas aún no identificadas para poner en marcha el plan criminal.
De acuerdo a las precisiones brindadas por Saldutti, el 23 de julio del año pasado, a las 19, pasó un Peugeot 308 negro que era manejado por Fernando Cortez y que tenía a otros tres ocupantes, entre ellos, a su hijo. Desde el vehículo abrieron fuego a discreción. En ese momento, Claudia Deldebbio había ido a acompañar a su hija Virginia Ferreyra hasta la parada de colectivo, justamente por temor a que sea víctima de un hecho de inseguridad.
Deldebbio murió en el acto como consecuencia de múltiples impactos de bala en su cuerpo, y su hija falleció el 24 de septiembre de 2022, hace poco más de un año, luego de permanecer internada durante dos meses en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez. También hubo una tercera víctima de los disparos: un adolescente de 16 años que estaba tomando una gaseosa con sus amigos y sufrió una herida de arma de fuego en una pierna.
Fernando y Lautaro Cortez ya fueron imputados el año pasado por el asesinato de Claudia Deldebbio mientras Virginia permanecía internada. Ahora, lo único que hicieron los fiscales fue agravar la acusación en su contra por tratarse de un doble crimen.
Ungaro y Martínez también fueron acusados por el fiscal Franco Carbone por haber sido quienes ordenaron a Fernando Cortez que baleara el Centro Municipal Distrito Sur y dejara un cartel que decía la siguiente frase: “Guille Cantero, controlá a tus gatos: Matías César, Pino, Los Picudos, que están batiendo la cana. Atte: La Mafia”. Por ese atentado, que fue perpetrado en bicicleta, el gatillero ya fue imputado el año pasado.
Ungaro, el temible
El año pasado, la Cámara Federal de Casación Penal rechazó los planteos de las defensas y confirmó la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal Federal Nº1 de Rosario por medio de la cual se condenó a René Daniel Ungaro como líder de una organización dedicada al tráfico de estupefacientes a la pena de 12 años de prisión.
La primera condena de “El Brujo” fue en 2011: 13 años de cárcel como uno de los autores del asesinato del ex jefe de la barrabrava de Newell’s, Roberto ‘Pimpi’ Caminos.
Ya preso en la cárcel de Piñero, Ungaro se dedicó a liderar su estructura a través de celulares. Su organización se fusionó con la del clan Los Funes, que también operaba en su mismo territorio: los barrios Tablada, Parque del Mercado, Municipal y República de la Sexta, todos en la zona Sur de Rosario. El objetivo era hacerle frente a Los Caminos, parientes de ‘Pimpi’ y relacionados con Los Monos.
Por esa asociación ilícita, que cometió balaceras, crímenes, usurpaciones y amenazas, recibió otros 7 años de prisión en mayo del 2021.