El sábado 22 de abril pasado, una casa del country Grand Bell, en La Plata, fue escenario de un robo en el que un grupo de delincuentes comandado por una mujer, tras llevar adelante un ingenioso engaño, se llevó una cifra millonaria en dólares, joyas de gran valor y hasta armas. Tras casi cinco meses de investigación, la líder de la organización fue descubierta y detenida en la ciudad de Madrid, España. La sospechosa quedó arrestada en ese país, a la espera de que se inicie el proceso de extradición a la Argentina.
Según confirmaron fuentes policiales a Infobae, se trata de Jesica Elizabeth Clavijo, una mujer de 36 años con domicilio fiscal registrado en Córdoba, quien empleó un método audaz para poder entrar al barrio privado. De acuerdo con lo que se observa en las cámaras de seguridad del lugar, la líder de la banda llegó al country a bordo de un auto Peugeot 208 de color gris, con cuatro delincuentes ocultos.
Las filmaciones mostraron cómo la sospechosa simuló colocar una tarjeta de acceso en la máquina de la entrada, pero no funcionó. En ese momento, los trabajadores que estaban en la garita levantaron la barrera sin pedirle identificación ni revisarle el vehículo, incumpliendo así con todos los protocolos de control establecidos.
Con el primer paso concretado, el resto fue más sencillo. Ingresaron por la fuerza a la propiedad, reunieron el botín y luego escaparon a toda velocidad, no sin antes romper la barrera de ingreso al barrio. Luego de la denuncia, la DDI de La Plata pudo obtener imágenes de los imputados y hallar el auto abandonado muy cerca del lugar del robo. En las misma secuencia, descubrieron que la banda abordaron un segundo vehículo, un Peugeot 308 azul, y se dieron a la fuga.
Ambos autos -establecieron los investigadores liderados por la UFI N°7 de Virginia Bravo- habían sido robados en la capital bonaerense. De acuerdo con la fuentes consultadas por este medio, el Peugeot azul fue encontrado en la zona de Lomas de Zamora, lo que permitió llevar adelante tres allanamientos con un resultado de gran valor para la causa: la identidad de la cabecilla de la organización.
Con el dato, la fiscal ordenó la captura nacional e internacional de la sospechosa, mientras que casi en paralelo lograba el dato de que Clavijo podría encontrarse en Córdoba. Casi de inmediato, el personal de la DDI de La Plata abocado a la investigación para dar con ella, en colaboración con la Policía Federal Argentina (PFA), llegaron hasta esa provincia. Sin embargo, tras varios días de trabajo de campo, no pudieron detenerla aunque sí obtuvieron la información de que habría abandonado el país.
Es por eso que la fiscal Bravo envió un pedido a Interpol para tratar de ubicarla lo antes posible. Finalmente, los resultados fueron positivos y la ubicaron en la capital española. Según indicaron las fuentes, Clavijo fue detenida hoy por la Policía Nacional Española y quedó a cargo de su custodia hasta que pueda viajar a la Argentina y rendir cuentas por el golpe al country.
Clavijo, que según registros previsionales, está dedicada a la venta al por menos de productos alimenticios, quedará formalmente acusada del delito de robo agravado. De los cómplices, no se hay ninguna novedad.
“Hay mucho lío con la seguridad privada”, aseguró a este medio un investigador policial los días posteriores al episodio. Precisamente, la familia que fue víctima del asalto sospechó que existió un “entregador”. “No fue un robo al voleo. Tenían información certera y se movían con tranquilidad a sabiendas de que nadie los iba a detener”, dijo a Télam en aquel entonces Diego Lacki, representante legal de las víctimas.
Dos días después del asalto, la Policía Bonaerense recibió una denuncia sobre un nuevo robo en un domicilio del mismo barrio. La denuncia, precisamente por el delito de hurto, fue realizada por el dueño de la casa el horas después del ataque de Clavijo. Según confirmaron fuentes policiales a Infobae, la víctima aseguró que viajó ese fin de semana y al volver notó que le faltaban joyas y bijouterie.
Increíblemente, también afirmó que dejó su puerta abierta sin llave. Ninguna entrada fue forzada. Ambos casos fueron investigados por la fiscal Bravo.