El llamado era urgente, un departamento ubicado en el barrio de Palermo se incendiaba. Inmediatamente, personal del Cuartel Recoleta de los Bomberos de la Ciudad acudió al lugar para sofocar las llamas y controlar la situación. Sin embargo, una vez que lo apagaron y procedieron a revisar el inmueble hallaron algo que los dejó atónitos: el lugar guardaba un arsenal de armas y granadas, algunas de ellas con la inscripción de Montoneros.
Desde explosivos hasta más de 90 armas cortas y largas fue el material que encontraron los rescatistas en el departamento ubicado en el piso 15 de un edificio en la calle Salguero. Enseguida, el personal de bomberos se contactó con personal de la Comisaría Vecinal 14A de la Policía de la Ciudad, que continuó con la exhaustiva revisión de la vivienda.
Ya que el propietario del departamento no se encontraba, los agentes hicieron una consulta con el fiscal Vila, de la Unidad Fiscal de Norte, quien dispuso dar intervención a la División Investigaciones de Armas de Fuego de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía de la Ciudad. El objetivo del procedimiento era cotejar las armas y documentar las mismas.
Al llegar, el personal de dicha división estableció la existencia de 70 armas cortas (no pudiéndose precisar marca, números y calibre), 19 fusiles (a determinarse modelo y calibre), 2 granadas de mano y 4 proyectiles de mortero por lo que se procedió a la evacuación preventiva el edificio y se solicitó la presencia del Escuadrón Antibomba para su manipulación. Las granadas de mano, que tenían la inscripción de Montoneros, fueron entregadas al Escuadrón Antibomba para su manipulación.
Miguel García, comisario del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado, brindó una rueda de prensa hoy a la mañana desde la puerta del edificio donde se produjo el hallazgo, brindó detalles del material secuestrado y confirmó que la situación ya está controlada. “El incendio se ha generado por un desperfecto eléctrico. Por esta situación interviene personal de la Comisaría Vecinal 14A, que detecta la presencia de armas de fuego. Hace la consulta pertinente con la Unidad de Flagrancia Norte, a cargo del Dr. Brotto, y el Dr. Vila, que es el auxiliar fiscal, pone la asistencia del Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado”,
“Cuando concurrimos al lugar, notamos que había seis granadas, además de las armas de fuego, por lo cual el día de ayer se procedió a la evacuación de todo el edificio, parte de la cuadra y se estableció un perímetro”, agregó el comisario García.
Sobre los explosivos, el funcionario policial afirmó que una de las granadas tenía la leyenda de “Montoneros”, mientras que una segunda se distinguía por decir “José Sabino Navarro”, en referencia a uno de los fundadores de la organización político militar Montoneros. “De las seis granadas, había dos de mano, las cuales aparentemente estaban en funcionamiento y eran de fabricación irregular, y otras cuatro que son de lanzamiento a través de fusiles. Esas aparentemente estaban inactivadas pero están siendo peritadas.”, explicó.
En cuanto a las armas de fuego, García señaló que, entre ellas, hay algunas que “son de uso prohibido, por ejemplo bastones que disparan cartuchos de escopeta y silenciadores”.
El propietario del departamento, según puntualizó el comisario García, no concurrió al departamento y en su lugar se presentó una apoderada legal.
Mientras que las armas ya fueron secuestradas y quedarán a disposición de la Fiscalía y el Juzgado interventor, que junto con el Departamento de Lucha contra el Crimen Organizado realizarán las pesquisas de rigor, el inmueble quedará bajo una consigna policial.
Otro vecino armado
Otro hallazgo espontáneo se había producido a principios de junio, cuando personal de la Policía de la Ciudad detuvo a un hombre para realizarle un control de tránsito.
La insólita situación se dio cuando Angel Yunior Parra Ditta, de 33 años y de origen colombiano, fue traicionado por sus nervios. En medio de un control de tránsito en pleno barrio porteño de Palermo, los agentes de la Policía lo obligaron a detener su marcha y descubrieron que circulaba armado con una pistola ilegal y un bate; y que además ya había enfrentado acusaciones graves ante la Justicia.
El reloj marcaba las 15 horas cuando la División Robos y Hurtos, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía porteña, realizaba un control de rutina en el cruce de las avenidas Juan B. Justo y Santa Fe. Al ver al hombre tan nervioso ante el pedido de la documentación, los efectivos requisaron el auto y dieron con una riñonera que llevaba un arma de fuego marca Bersa, modelo TPR9.
De inmediato, el hombre de 33 años fue asegurado por la Policía. Luego, exhibió una credencial de tenencia de arma y una tarjeta de consumo de municiones. Sin embargo, Parra Ditta no tenía acreditación de portación, por lo que los oficiales siguieron con la investigación. El resultado final: tenía también un bate de béisbol de color negro. De acuerdo con registros oficiales, el hombre está registrado como monotributista clase A y su actividad principal es el “servicio de transporte automotor no regular de pasajeros de oferta libre; excepto en taxis y remises, alquiler de autos con chofer y transporte escolar”.
Luego, las consultas pertinentes deslizaron que tenía antecedentes por violencia de género, aunque sin ningún impedimento legal. Así, la Unidad Fiscal Flagrancia Norte, a cargo del fiscal Alejandro Martín Pellicoli, dispuso la detención del colombiano, en calidad de comunicado, y el secuestro del auto y el bate de béisbol. Además, ordenó que se labren actuaciones por el delito de portación de arma de guerra. Fue trasladado a la sede de la Policía en la calle Combate de los Pozos al 155.