A Hugo Eduardo Arredondo Suárez, el recluso mendocino de 34 años que intentó apuñalar a la fiscal mendocina Claudia Ríos durante un juicio, lo conocen como “El Mecha” en la cárcel, donde es considerado un preso de altísima peligrosidad. Ese es su lugar de residencia desde que asesinó a un militar retirado durante un violento asalto en marzo de 2015.
Por ese crimen del militar, el reo fue condenado a prisión perpetua por homicidio criminis causa, indicaron fuentes judiciales a Infobae. Jorge Daniel Montilla, la víctima, recibió cuatro balazos cuando fue sorprendido por un grupo de delincuentes, en su casa del barrio Tamarindo II de Las Heras, que intentaron robarle su camioneta Hilux. Montilla murió en la escena.
Luego, mientras “El Mecha” se encontraba encerrado en el penal de Cacheuta, atacó y mató a un preso identificado como Nicolás Lozano. La fiscal Ríos, que estuvo al frente de esa investigación, pidió que sea condenado. La jueza María Julieta Espínola lo sentenció a 14 años de cárcel, según publicó El Sol de Mendoza.
Y este martes volvió a ser noticia por haber atacado a la fiscal de instrucción Claudia Ríos durante una audiencia de un juicio en su contra por una tentativa de homicidio intramuros, que cometió junto a otros internos.
Se trata de Jorge Darío Bracamonte y Lucas Gabriel Garro. Los tres son acusados por haber atacado de forma brutal a otro preso, identificado como Carlos Enrique Olmedo, indicó Mendoza Post. De acuerdo a la información, le propinaron violentas patadas y usaron para lastimarlo un arma blanca casera, conocida como “chuza”, la misma con la que el interno intentó agredir a la fiscal este miércoles.
Según la publicación, en septiembre de 2022 estuvo involucrado en otro episodio perturbador. Se le imputa haber drogado y sometido a un compañero de encierro mediante empalamiento. Por ese hecho, “El Mecha” se encuentra bajo prisión preventiva. Esa causa aún no fue elevada a juicio.
El ataque
La fiscal atacada es la titular de la Unidad Fiscal de Homicidios de Mendoza. Entre otros casos, Ríos llevó a juicio oral al israelí Gilad Pereg, acusado de asesinar a su madre y a su tía, cuyos cuerpos fueron hallados enterrados en su casa de la ciudad de Guaymallén en enero de 2019.
Luego de agredir a la funcionaria judicial, Arredondo Suárez tomó como escudo humano a una estudiante a quien hirió en el cuello. Fue reducido cuando la representante del ministerio público le arrojó gas pimienta en el rostro.
El procurador General de Mendoza, Alejandro Guille, detalló esta tarde en una conferencia de prensa que el hecho se produjo en un cuarto intermedio de un juicio, cuando uno de los presos juzgados pidió sacarse una campera y se abalanzó con el arma blanca, contra “el cuello de la fiscal” que atinó a echarse para atrás.
“Era una audiencia de tres imputados, uno de los cuales tenía como antecedentes una perpetua, otro a 12 años y otro estaba purgando una condena de 5 años. En un cuarto intermedio, uno de ellos, el que tenía la perpetua, se abalanza con un arma blanca sobre la fiscal Claudia Ríos, quien alcanza a correrse”, relató Guille.
Luego, el Procurador añadió: “El hombre sale corriendo y lo reducen, pero antes toma del cuello a una pasante que estaba observando el juicio y que resultó con una lesión en el cuello, que está revisando el Cuerpo Médico Forense... La fiscal está bien; ella tenía entre sus prendas un gas pimienta y le arrojó en el rostro a esta persona que la agredió”.
Consultado sobre el arma que llevaba el recluso procedente del penal de Almafuerte, Guille dijo: “Era una ‘chuza’, suponemos que se les ha pasado a los guardias, de alguna manera la ha ingresado a la sala de audiencias y eso está en investigación”.
Al respecto, explicó que los presos ingresan al Polo Judicial por el edificio Estrada y por un túnel, que es el ducto de traslados, y “se supone que ahí los revisan”, por lo que ahora es todo materia de investigación.
Por último, Guille dijo que no hubo “ningún tipo de amenaza” previa del preso hacia la fiscal, sino que directamente le “arrojó una puñalada a la altura del cuello”, y al respecto explicó que a los detenidos se les quitan las esposas cuando comparecen ante un tribunal.