El cadáver calcinado de una mujer de 68 años fue hallado en la localidad bonaerense de Morón después de un allanamiento, en el que efectivos de la Policía ingresaron a su casa y encontraron los restos en el baño. Ahora, los investigadores estudian cuáles fueron las causas del incendio y cómo murió la víctima.
La mujer fue identificada como Gladys Sánchez, que vivía en esa localidad al oeste del Gran Buenos Aires. El hallazgo se produjo en horas del mediodía de este miércoles tras un allanamiento que realizaron efectivos de la Policía en una propiedad ubicada en la calle Intendente Ernesto Grant al 200, en una de las zonas residenciales del municipio.
Según informó la agencia Télam, el aviso a los efectivos lo hizo el hijo de la víctima, de 29 años, que denunció que no podía comunicarse con la mujer y concurrió al domicilio con los uniformados.
El joven sostuvo que intentó ingresar a su hogar, ubicado 1000 metros del Acceso Oeste, en horas del mediodía, pero se topó con la puerta trabada.
Al ingresar al domicilio, los oficiales se encontraron con la hija de 23 años de la fallecida, que padece un trastorno psiquiátrico, y también con la abuela de la joven, que se hallaba postrada en una cama en un estado senil. Finalmente, tras abrir la puerta del baño, vieron la macabra escena: el cuerpo calcinado de la mujer de 68 años.
En el caso interviene la fiscal Mariana Rueda, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 especializada en Violencia Familiar y de Género del Departamento Judicial de Morón, quien solicitó la presencia en el lugar de los peritos de la Policía Científica, del cuerpo médico y del cuerpo de Bomberos para poder recopilar todas las pruebas que sean de relevancia para la investigación. Hasta el momento, no hay sospechosos del caso.
Este jueves, en tanto, se realizará la autopsia para determinar cuál fue la causa de la muerte de Gladys y para precisar si se encontraba viva al momento de ser quemada. Por otro lado, se aguardan los resultados preliminares de las pericias realizadas en el baño de la casa de la víctima, donde intentarán establecer si el fuego que se originó en el baño fue de forma intencional o accidental.
Hace poco más de un mes, el partido de Morón fue el escenario de otro macabro hallazgo; esta vez, en la localidad de Castelar, cuando encontraron muertos a una oficial de la Policía de la Ciudad y a un cabo de la Policía Federal Argentina (PFA) dentro de su vivienda.
Las víctimas fueron identificadas como Zulema Serrano (28), oficial de la policía porteña, y su pareja, Juan Carlos Bertini, quien se desempeñaba División Unidad Operativa Morón de la PFA. Ambos presentaban una herida de bala en la cabeza.
Fuentes policiales confirmaron a Infobae que fue una vecina quien alertó al sistema del emergencias 911 acerca de una violenta pelea dentro del domicilio donde ocurrió el violento episodio.
La mujer, que vive justo enfrente del domicilio del cabo, relató que escuchó los gritos de su vecina pidiendo ayuda y luego escuchó la detonación de un arma de fuego.
La Policía se hizo presente en el lugar de inmediato, junto con un móvil del SAME. Al ingresar, se encontraron con el cuerpo de la mujer tendido en el piso del living comedor y, a unos pocos metros, el cadáver del hombre con una pistola Bersa Pro Rinde serie 11-F13876 calibre 9mm a su lado. Por esto mismo, las primeras hipótesis plantearían que se pudo haber tratado de un femicidio seguido de suicidio.
Según trascendió, el cabo se encontraba en servicio cuando sucedieron los hechos. Había sido designado como consigna a un domicilio situado en la calle Santiago N° 5961, en la localidad de Isidro Casanova, por orden de la Ayudantía Especializada en Delitos de Gravedad Institucional del Departamento Judicial de La Matanza. Sin embargo, el efectivo se retiró de su puesto de trabajo sin dar aviso ni teniendo autorización previa de algún superior.