El cadáver de Yonathan Bustamante fue encontrado enterrada y completamente calcinada en el fondo de una casa del barrio Termas Huincó de la ciudad de Mar del Plata. Su identidad fue establecida luego del análisis de las huellas obtenidas de lo que poco que quedaba de su cuerpo, que fueron cotejados con datos incorporados al Sistema de Identificación de Huellas Dactilares (AFIS).
De esta manera, se confirmó la sospecha que tenían los investigadores: Bustamante, de 34 años, estaba desaparecido desde el pasado 12 de julio. Por el hecho, fue detenido Diego Zislis (45), quien residía en la vivienda de la calle Tripulantes del Fournier, donde el sábado pasado fueron encontrados los restos de la víctima.
La denuncia por averiguación de paradero fue realizada por su madre el lunes de la semana pasada, cuando se presentó en una comisaría y dijo que su hijo tenía problemas de adicción y antecedentes penales por robo. La última vez que lo había visto había sido aquel 12 de julio pasado. De acuerdo con la denuncia, Bustamante se había ido de su casa en el barrio San Martín tras una discusión con su mamá. El hombre había sido condenado a un año y seis meses de prisión, tras un juicio abreviado, por haber intentado robarle el auto a una mujer.
Te puede interesar: Condenaron a prisión perpetua a Brandon Bay, el “niño jefe” del narcotráfico de Rosario
“La última vez que lo vi fue durante la madrugada de ese miércoles. Discutimos y se fue. Nunca más volvió”, dijo la mujer en diálogo con La Capital de Mar del Plata antes del hallazgo del cuerpo. “Hice la denuncia porque solíamos tener discusiones, pero siempre volvía. Ahora, pasaron los días y al no saber nada de él, denuncié su desaparición a la policía”, agregó.
Cuatro días después de haber radicado la denuncia, la mujer se dirigió nuevamente a la Comisaría 5° de Mar del Plata y aportó un dato clave que permitió: dijo que otro de sus hijos, que está detenido en la Unidad Penal XV de Batán, le contó que le habían informado que su hermano estaba muerto y enterrado en una vivienda del barrio Termas Huincó.
Con esa información, la Justicia ordenó el sábado un allanamiento de urgencia y se encontró con la escena macabra en el fondo de la casa de Zislis.
De acuerdo con las primeras observaciones, el cuerpo estaba en un 90% quemado, por lo que la identificación tardó poco más de 48 horas. Medios locales marplatenses señalaron que además, la autopsia confirmó que la víctima sufrió lesiones severas compatibles con golpes en la cabeza y que la data de muerte es de aproximadamente quince días.
El dueño de la propiedad fue detenido el domingo mientras caminaba a metros del cruce de las avenidas Edison y Fortunato de la Plaza y permanece alojado en la unidad carcelaria 44 de Batán. Los investigadores sospechan que en el domicilio del acusado funcionaba un punto de venta de drogas. El único imputado quedó alojado en la Unidad Penal 44 de Batán a la espera de ser indagado.
A partir de ahora, la causa por el homicidio, que en las primeras horas instruyó el fiscal Alejandro Pellegrini, queda en manos de María Florencia Salas, quien estaba de turno el día que se hizo la denuncia por la averiguación de paradero de Bustamante.
*con información de Télam
Seguir leyendo