Condenaron a prisión perpetua a Brandon Bay, el “niño jefe” del narcotráfico de Rosario

La Justicia de Santa Fe le atribuyó haber planificado tres homicidios ocurridos en la ciudad de San Lorenzo entre agosto de 2019 y mayo de 2020 con el objetivo de copar el mercado local de la droga

Guardar
Brandon Bay, hoy condenado
Brandon Bay, hoy condenado

Brandon Gabriel Bay, uno de los narcos emergentes en la escena de la violencia criminal de Rosario, hoy preso en el penal Marcos Paz, fue condenado este martes a la pena de prisión perpetua por la Justicia provincial, que lo halló responsable de la planificación de tres asesinatos que comandó desde la cárcel y que ocurrieron entre agosto de 2019 y mayo de 2020 en San Lorenzo.

La resolución fue dada a conocer en los Tribunales provinciales de San Lorenzo por los jueces Eugenio Romanini, Carlos Gazza y Mariel Minetti, quienes también dieron perpetua a Cintia Nair Estrella –pareja de Brandon Bay– y a los sicarios de la banda Fabián Sandoval y Claudio “Primo” Ríos. A otro de los gatilleros de la organización, Juan Manuel “Pera” Álvarez le dieron 15 años de prisión.

Bay tiene 28 años y está detenido desde 2017 por una causa por asociación ilícita por la que ya fue condenado a 5 años. Ahora, los fiscales Matías Edery, Luis Schiappa Pietra y Aquiles Balbis lo acusaron por liderar una nueva banda que, bajo el nombre de “Los Gorditos”, desde el barrio Tiro Suizo de la zona sur de Rosario intentó copar el mercado de drogas de la vecina ciudad de San Lorenzo.

Su estrategia inicial, según la acusación, fue atacar a las dos organizaciones que se dedican al menudeo para que se peleen entre ellas.

Así, se convierte en el segundo capo de la ciudad condenado a perpetua: Esteban Lindor Alvarado, que intentó fugarse en helicóptero del penal de Ezeiza, recibió la misma condena en 2022.

Te puede interesar: Las órdenes de Brandon Bay, el “niño jefe” narco de Rosario que comandaba a su mamá y a policías coimeros desde la cárcel

Cocaína vinculada a la banda de Brandon
Cocaína vinculada a la banda de Brandon

A Bay le atribuyeron el crimen de Rodrigo Gigena, ocurrido el 6 de agosto de 2019, el de Gerardo “Pecho” Pérez, perpetrado el 25 de mayo de 2020, y el de Brian “Runi” Sánchez, cometido el 28 de mayo de 2020, que provocó el hartazgo de los vecinos.

Gigena tenía 25 años y fue asesinado a tiros a principios de agosto de 2019 en Clemente Albelo al 3300. Según la investigación, le dispararon desde un Ford Focus gris y lo hirieron en el abdomen mientras estaba en la puerta de un almacén. Minutos después, un grupo de vecinos prendió fuego un búnker que estaba ubicado a tres cuadras del lugar, a quien responsabilizaron por el homicidio.

Los otros dos asesinatos tuvieron lugar el 25 y el 28 de mayo de 2020. Ambos fueron cometidos por Claudio “Primo” Ríos, cuya situación llamó mucho la atención a los fiscales: salió de prisión el 22 de mayo y en cuestión de seis días mató a dos personas por encargo.

La primera víctima de Ríos fue Gerardo Pérez, de 54 años, quien fue atacado el 25 de mayo de 2020 de un tiro en el tórax, por el que murió en el hospital Granaderos a caballo de San Lorenzo. La segunda fue Brian Sánchez, de apenas 16 años, baleado en el pecho.

Después del crimen del adolescente hubo una movilización de vecinos, que cortaron las calles y prendieron fuego cubiertas en reclamo del esclarecimiento del caso.

Durante la investigación de los fiscales se detectó un mensaje de voz de WhatsApp que envió Brandon Bay a su sicario “Primo” Ríos el 22 de mayo, en la previa a los últimos dos crímenes.

“Con la tarta prrrrr (sic) en la jeta. En la jeta. Sí, de ahí arriba, sin bajarse”, le pidió, tal vez en referencia a una ametralladora.

Casualmente, en la escena del homicidio de Sánchez se secuestraron 30 vainas servidas y se presume que se usó, precisamente, una ametralladora.

“Esta organización procuró ocupar sectores de la ciudad de San Lorenzo y excluir de allí a otras bandas antagónicas. Para llevar a cabo ese objetivo los integrantes de la asociación cometieron diversos delitos, entre otros, la sustracción de vehículos, robos a viviendas, homicidios, lesiones, atentados contra las personas, amenazas y venta de estupefacientes”, explicaron los fiscales en una de las audiencias del juicio cuyo veredicto se dio a conocer este martes.

Mensaje de WhatsApp de la banda de Bay
Mensaje de WhatsApp de la banda de Bay

Tal como ocurre con Los Monos, la estructura de Brandon es netamente una cuestión familiar.

A fines de 2021, un grupo de su clan fue imputado por el fiscal provincial Pablo Socca, que integra un equipo especial dedicado a investigar balaceras, por supuestamente recibir las ordenes que Brandon enviaba a través de celulares y del teléfono fijo de su pabellón, tal como “Guille” Cantero, jefe de Los Monos, preso en la misma cárcel. Las órdenes iban desde realizar balaceras y usurpaciones hasta regentear la venta de droga.

Entre las personas acusadas se encontraban su madre, sus hermanas y hasta tres policías que supuestamente recibieron coimas para liberar a dos integrantes de la organización que habían caído en un procedimiento en septiembre pasado.

A pesar de ser removido de su territorio, se cree que Bay siguió activo. De acuerdo a datos de la investigación en su contra, la Justicia cree que emitió múltiples órdenes ligadas a delitos provinciales como balaceras, crímenes y usurpaciones. También, delitos federales vinculados a la compra, estiramiento, fraccionamiento y venta de marihuana y cocaína. Esas indicaciones las hizo, siempre según investigadores, desde el fijo del pabellón y desde celulares a través de distintos chips.

Seguir leyendo:

Guardar