Gustavo Galván, un trabajador del rubro de la construcción de 39 años, murió el domingo pasado en Monte Grande al caer de su moto cuando escapaba de dos motochorros que intentaron robarle. Su hijo de 14 años iba con él cuando ocurrió el accidente. El adolescente había ido a un cumpleaños y su padre se encargó de irlo a buscar. Regresaban a su casa al momento de la tragedia.
De acuerdo a fuentes del caso, pasadas las 6 del domingo, Galván y su hijo fueron interceptados por los ladrones en la intercepción de Avenida Pedro Suárez y Avenida Argentina. El obrero aceleró para escapar de los delincuentes y, en la huida, chocó contra un poste de luz, que se rompió por el impacto, y cayó al pavimento.
Cuando llegó la Policía Bonaerense, Galván yacía boca abajo y no respondía. Ya no tenía pulso. Su hijo estaba sentado sobre la calle y se quejaba de dolor. Unos 20 minutos después, arribó la ambulancia. Los médicos declararon muerto al obrero y revisaron al menor.
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El adolescente fue trasladado de urgencia al hospital Santamarina de Monte Grande, donde este martes se recuperaba. Tras el shock inicial, logró relatar su experiencia a la Policía, algo que podrá repetir cuando declare como testigo en el expediente.
“Su hijo declaró que los siguieron dos encapuchados en moto. El papá quiso perderlos. Así es que agarra un pozo y cae”, indicó Alejandra Lovera, la cuñada de Galván. Y contó que, tras permanecer internado dos días, su sobrino será dado de alta en las próximas horas.
Lovera, además, detalló que su cuñado, en la persecución, decidió tomar un camino diferente y no dirigirse a su casa para evitar que le robaran al resto de su familia. El hombre murió casi al instante, producto de su golpe contra el asfalto.
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La fiscal Marcela María de Luján Ruiz, titular de la UFI N° 2 Descentralizada de Monte Grande, investiga la causa como un homicidio culposo y dispuso la realización de la autopsia y pericias complementarias. El cuerpo de Galván permanece en la morgue de Lomas de Zamora.
Las fuentes del caso agregaron, a la vez, que una mujer presenció el accidente y declaró que vio “dos motos que iban a gran velocidad” y una de ella colisionó contra un poste de luz, mientras que la otra siguió su marcha. Precisamente, la testigo fue quien llamó al 911.
Este lunes, familiares de Galván realizaron una concentración en el sitio en el que ocurrió el accidente para pedir justicia y que la muerte no quede impune. Dos cámaras de seguridad registraron la secuencia y sus imágenes son parte de la investigación para encontrar a los delincuentes.
Antecedentes
Los hechos similares se repiten en el Conurbano. El 1° de junio pasado, Horacio Ezequiel Borja López, de 22 años, que pertenecía a la Policía bonaerense y era numerario del GPM Florencio Varela, fue asesinado de un tiro en la cabeza por ladrones que lo interceptaron para robarle la moto en la localidad de Burzaco.
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La víctima fue interceptada en el cruce de las calles Eduardo Coutinho y Sarcione cuando circulaba a bordo de su moto Dominar 400. Varios delincuentes armados, que se trasladaban en un Peugeot 206, intentaron robarle el vehículo y le dispararon en la cabeza.
El agente asesinado habría intentado defenderse para evitar que le sustrajeran la moto, actitud que desencadenó en un enfrentamiento armado con los agresores que se dieron a la fuga en el vehículo de color gris.
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