La Policía Bonaerense detuvo en las últimas horas al principal sospechoso del crimen de Emilio Gabriel Ghezzi (55), el vecino de la localidad de Aldo Bonzi que fue asesinado a fines de mayo pasado tras resistirse al robo de su camioneta cuando salía de su domicilio. Aquel día, la víctima fue abordada por tres delincuentes con los que forcejeó hasta que lo ejecutaron de un balazo por la espalda. Murió en el lugar.
Este lunes el sospechoso señalado como autor del disparo cayó tras una investigación de la DDI de La Matanza que conduce el comisario inspector Flavio Marino, bajo las órdenes de los fiscales Claudio Fornaro y Adrián Arribas. Se trata de Nicolás Emanuel Goñi, de 24 años.
Según precisaron fuentes del caso a Infobae, lo capturaron en un hotel alojamiento de La Tablada, en la zona de Boulogne Sur Mer y Crovara.
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Los investigadores habían obtenido el dato de que se encontraría allí y montaron un operativo encubierto: cuando lo vieron salir, lo atraparon.
Goñi fue trasladado a un calabozo. Fuentes judiciales dijeron a este medio que en el transcurso de este martes fue indagado: se negó a declarar. Así, quedó bajo arresto. Está imputado por homicidio criminis causa y robo agravado por el uso de arma de fuego y por haberse cometido en poblado y en banda.
Cabe recordar que por el caso ya habían sido detenidos otros dos sospechosos en allanamientos realizados poco después del crimen. Uno es Jorge Facundo Leguizamón, de 19 años, quien sigue encerrado con prisión preventiva. El otro, un adolescente de 15 años, inimputable por edad y cuya identidad se reserva por cuestiones legales. Este último se encuentra alojado en un instituto de menores del conurbano bonaerense, a disposición del fiscal Marcelo Germinario, titular de la Fiscalía del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de La Matanza.
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Para ambos no es su primera vez tras las rejas: tienen antecedentes penales en varias causas por distintos delitos. Fuentes judiciales precisaron a la agencia Télam que a Leguizamón le abrieron, entre agosto de 2021 y el mismo mes de 2022, tres expedientes por robo agravado, hurto e infracción a la Ley de Drogas.
En el caso del menor, estuvo involucrado en un robo de auto cometido en febrero pasado y en otro hecho por portación de arma de guerra y resistencia a la autoridad en abril de este año.
El día del crimen, Emilio sacó su Citroën C3 blanco del garage de su casa, ubicada en la calle Humahuaca. Luego, descendió de su vehículo. En ese momento, tres delincuentes vestidos de negro -que aguardaban en la esquina a bordo de un auto de color rojo- lo atacaron para robarle.
Uno de los sospechosos interceptó a la víctima, pero Emilio se resistió y respondió con un golpe de puño que marcó el inicio de los forcejeos. Según se observa en las imágenes captadas por una cámara de seguridad de una vivienda aledaña -y que ilustran esta nota-, en ese momento los otros dos ladrones comenzaron a atacarlo.
Tras unos segundos durante los cuales la víctima hizo todo lo posible por zafar de los delincuentes -incluso arrojó a uno de ellos al asfalto-, Emilio recibió un disparo fatal en la espalda y quedó tendido en la calle. Sus asesinos huyeron en el auto rojo, en donde los esperaba el cuarto cómplice.
Natalia, la hija de la novia de Emilio, en diálogo con la prensa contó que su padrastro tenía “dos hijos y nietos del corazón” y que su madre “está destruida”. Y subrayó: “Emilio era una persona buenísima, solo hoy salió más temprano para ir al trabajo porque tenía que llevar a mi mamá al mediodía al médico por un estudio. Lo asesinaron a sangre fría, sin piedad y sin robar nada”.
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