Sebastián Villa llegó esta mañana los tribunales de Lomas de Zamora para decir sus últimas palabras en el juicio en su contra por violencia de género antes de recibir el veredicto. El jugador de Boca llegó poco antes de las 10, acompañado de su abogado Martin Apolo. Luego, se sentó en el banquillo de los acusados y se defendió de las imputaciones en su contra por los delitos de lesiones leves y amenazas sufridas por su ex pareja, Daniela Cortés.
“Soy una excelente persona, nunca le haría daño a Daniela. Soy un buen hijo, un buen hermano. Creo en Dios. Espero que todo salga bien. Soy inocente”, afirmó.
Una vez que el delantero terminó su monólogo, la jueza Susana Dávalos fijó la fecha de la audiencia final, donde se leerá la decisión. La audiencia ocurrirá este viernes a las 13 horas en los tribunales de Lomas de Zamora. El fiscal Sergio Anauati solicitó que el Juzgado N°3 lo condene a la pena de dos años y tres meses de prisión de ejecución condicional por el delito de lesiones leves y amenazas, además de prohibirle que se acerque a la víctima.
Villa aceptó ser indagado en el proceso. En su alocución, negó todas las acusaciones de su ex pareja Daniela Cortés y señaló a ella como la responsable. También la acusó de haberle robado dinero. “Nunca cometí ninguno de los delitos por los que se me acusan”, dijo. Entre otras cosas, dijo que sufrió “episodios violentos por parte de ella” y que tuvo que “usar camisetas de manga larga” para que sus compañeros “no vean lo lastimado que estaba por los golpes que recibía” en su casa.
“Daniela me pedía plata constantemente. Le pagué una operación estética de 14 mil dólares”, fue otra de las frases del delantero. Incluso, la acusó de robo: “Cuando a mí me compró Boca, compré un departamento en Medellín y la familia de Daniela se quedó con ese departamento. De los tres millones que cobré por el pase a Boca, ella se quedó con una parte”.
Antes de finalizar esa declaración en aquella jornada, la defensa del delantero solicitó que se muestre un video de la intimidad de la pareja, grabado por el propio Villa en la habitación principal de la casa que compartían, donde se ve a Cortés en ropa interior durante una discusión.
En sus alegatos, el fiscal Anauati afirmó: “Es imprescindible que se valore en esta causa que hubo violencia en todas sus formas hacía la mujer”. Luego, amplió aclarando que Villa le dijo en reiteradas oportunidades que se vaya de la casa que si no iba a terminar con la vida de ella y de su familia. Además, el fiscal aseguró que se “acreditaron golpes de puño en la frente de la víctima con un anillo que usa el imputado”.
El fiscal realizó un análisis de todas las pruebas y concluyó que, esas evidencias, mostraron una “escalada en la violencia”. Para el fiscal primero “empezaron los celos” y, luego, el delantero de Boca “se ponía cada vez más violento, sobre todo cuando tomaba alcohol”.
“La víctima sólo compartió estos actos de violencia con su hermana y su amiga Erika, ya que tenía miedo de lo que Villa pudiera hacerle a su familia en Colombia”, siguió el fiscal en relación a las amenazas que, según declaró Cortes desde el primer día, recibió de parte del futbolista.
En este punto, vale aclarar que, en su denuncia, la víctima dijo que, durante una de las agresiones, Villa tomó su teléfono y la amenazó con llamar a un supuesto sicario en Colombia para que asesine a su familia. Para el fiscal Anauati, según su alegato, esas amenazas quedaron corroboradas.
La defensa de Villa, encabezada por el doctor Martín Apolo, también realizó su alegato. Allí solicitó la absolución de su cliente y dijo que el deportista es “una persona extraordinaria”. Luego se refirió a los orígenes humildes, del contexto en el que fue criado y que “está sentado en este juicio por ser un jugador de fútbol de alta exposición”.
Luego, el abogado calificó la denuncia como “falsa”: “La palabra de la persona que denuncia no es una prueba acabada. Y este, es uno de esos casos. Ella aprovechó el sesgo de género para realizar esta denuncia. Acá se busca probar algo que no sucedió”.
Apolo continuó con otras consideraciones generales sobre la violencia de género: “La llamada violencia de género es muchas veces tergiversada, y no se tienen en cuenta las pruebas presentadas por el hombre”. Luego hizo mención, por fin, a la denuncia en particular: “Ese 27 de abril de 2020, Villa le dijo a Cortés que no quería seguir con la relación y fue allí cuando Cortés comenzó a chantajearlo”.
El hecho que se investiga sucedió el 27 de abril de 2020 en el interior de una vivienda del country Saint Thomas de Canning, cuando Villa le dijo a Daniela Cortés que le iba a arruinar su vida y le dio un golpe de puño en la frente, con un anillo que portaba, para luego tomarla del brazo y posteriormente la arrojó al suelo provocándole, pegándole patadas para provocarle distintas lesiones de carácter leve.
Este viernes, la jueza Dávalos finalmente decidirá si el futbolista de Boca es culpable o inocente.
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