Otro hecho de inseguridad ocurrió en las últimas horas en el Conurbano bonaerense. Esta vez fue en el partido de Quilmes, donde dos mujeres, una madre y su hija de 15 años, fueron sorprendidas al llegar a su hogar por cinco delincuentes que las esperaban en el interior de la casa.
El hecho ocurrió el último martes en una vivienda ubicada en la intersección de las calles 1º de Mayo y Azcuénaga, en la zona Sur del Conurbano. Todo quedó registrado por las cámaras de seguridad colocadas en el exterior de la vivienda, las cuales grabaron la violenta secuencia en la que los sospechosos arrastraron a una de ellas por unas escaleras para evitar que escapara.
Las víctimas fueron Roxana y Estefanía, madre e hija, respectivamente, que fueron interceptadas por los ladrones cuando llegaron a su casa pasadas las 14. Habían salido a hacer compras por el barrio.
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La primera en enfrentar la situación fue la adolescente de 15 años, quien abrió la puerta y fue rápidamente atrapada por dos hombres que le taparon la boca y la escondieron detrás de una pared.
“Yo me demoré agarrando una mochila del auto y, cuando estoy por ingresar, veo a dos personas adentro de mi casa. Primero, pensé que era mi hijo haciendo una broma, después me di cuenta que no”, relató Roxana en diálogo con el canal de noticias TN.
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Es ella quien se ve en las imágenes: al menos tres ladrones salen a perseguirla hasta la entrada del domicilio al notar que la intención de la mujer era escapar. A fin de evitar que pidiera auxilio, los sospechosos la agarraron en medio de las escaleras que van desde la vereda hasta la puerta principal de la propiedad y la arrastraron hasta volver a ingresarla. Luego, la dejaron junto a su hija hasta que terminaron de robar y huyeron.
En este sentido, la víctima relató que la banda delictiva logró entrar a la vivienda por el portón mientras ellas aún seguían en el interior. Según indicó, pudieron permanecer gracias a que utilizaron un inhibidor de alarma que hizo que esta no se activara.
“Nosotras estábamos en la cocina preparándonos para irnos. En esos tres minutos que demoramos en salir, ellos ingresaron, pero no nos cruzamos. Yo activé la alarma y me fui”, dijo Roxana. Fue en ese momento que, según cuenta, los ladrones habrían aprovechado para desactivarla y así revolver toda la casa en busca de dinero y objetos de valor que luego se llevaron en una mochila.
“Cuando vuelvo y veo a dos personas adentro de mi casa, quiero salir para gritar. Me agarran, me tiran, me arrastran y cierran la puerta. Los vecinos se alarmaron todos y llamaron a la Policía”, dijo.
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Y añadió al respecto de su modus operandi que utilizaron los involucrados: “Me di cuenta lo de la alarma -que la habían inhibido- porque siempre cuando nos vamos y se corta la luz, la empresa de seguridad nos manda un mensaje al celular dando aviso. Y esta vez no pasó. Además, uno de ellos tenía un palito de metal de 30 centímetros, era el inhibidor”.
Tras el hecho, en el que ninguna de las víctimas sufrió heridas de gravedad, los delincuentes escaparon en un auto que los esperaba en la esquina. En este sentido, la Policía aún investiga si se trata de una banda que se moviliza realizando robos por la zona.
En el marco de la investigación, Roxana contó a las autoridades que días atrás del robo en el que se llevaron varias pertenencias suyas y plata, su hija había visto a una persona en la vereda de su casa que le estaba sacando fotos a la vivienda. En consecuencia, se acercó a increparlos, pero se escaparon. Ninguna hizo la denuncia por el episodio. No obstante, ahora creen que dicho suceso pudo haber estado ligado a la entradera que sufrieron en las últimas horas.
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