Asaltaron otra vez la tienda de una modelo y empresaria, y la policía le dijo: “Mientras sigan siendo todas mujeres en el local van a seguir entrando a robar”

Ocurrió este sábado en la casa de lencería de Ivana Figeiras, ubicado en el barrio porteño de Palermo. Fue un robo violento, a mano armada, y es la segunda vez que asaltan el comercio en cinco meses

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Un ladrón armado ingresó a
Un ladrón armado ingresó a robar al local de Pomapavana en Palermo, de Ivana Figueiras

Un ladrón armado robó esta mañana en un comercio de lencería de la modelo y empresaria Ivana Figueiras. “Dame la plata o te pego un tiro”, le dijo el delincuente a una de las empleadas mientras le apuntaba. Después, escapó con dinero y un teléfono celular.

El hecho de inseguridad ocurrió en el local de Pompavana ubicado sobre la calle Malabia al 1600, en el barrio porteño de Palermo. Fue alrededor de las 11 de este sábado, unos minutos después de que el negocio de ropa interior abriera sus puertas.

En ese momento, en el lugar se encontraban dos empleadas. Un hombre ingresó y se hizo pasar por cliente. Luego sacó el arma, amenazó a la vendedora que lo atendió y les robó. También había otra mujer, al parecer clienta, aunque se sospecha si era cómplice del asaltante.

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“No puedo parar de llorar y se me parte el corazón. No puedo creer dejarlo todo y vivir estas injusticias. ¿Qué más hay que hacer? Harta”, hizo su catarsis Figueiras en las redes sociales lamentando lo sucedido.

Allí también contó: “Me llamó la vendedora llorando a los gritos, asustada porque la apuntaron con un arma. Es la segunda vez en meses que entran a robar a mi local de Palermo”. En diálogo con Infobae, recordó que el primer robo había sido a fines del año pasado, un ataque violento con una modalidad similar.

Ivana Figueiras, modelo y emprendedora
Ivana Figueiras, modelo y emprendedora (Franco Fafasuli)

Luego de ese episodio dispusieron algunas medidas de seguridad. “Pero igualmente no le podemos negar el ingreso a nadie”, explicó la creadora de la marca que, además, tomó una decisión tajante: “Por miedo, a mi hija de 7 años ya no la llevo más al local”.

Por otra parte, expresó su indignación por los dichos de un policía que se acercó al lugar tras el hecho. Según le contó la vendedora víctima del robo, el efectivo les dijo: “Mientras sigan siendo todas mujeres en el local van a seguir entrando a robar”. “No entiendo qué quiso decir, ¿si son hombres vendiendo bombachas y corpiños acaso no te roban?”, cuestionó Figueiras.

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Uno de los hechos de inseguridad más recientes en el barrio porteño de Palermo había sido a principios del mes pasado, cuando Juan Francisco Fernández Acosta, de 27 años, oriundo de Venezuela, fue asesinado de un disparo por un ladrón armado.

El crimen ocurrió aquel domingo cerca de las 2.15 de la madrugada. En ese momento, la víctima se encontraba junto a un amigo frente a su casa ubicada en la calle Aráoz al 1400. Allí, de acuerdo con la reconstrucción que pudieron hacer los investigadores, la víctima recibió un tiro en la cabeza después de resistirse -mínimamente- al robo de su celular.

El acompañante del joven de 27 años, un joven también venezolano identificado como Thomas Vázquez, le dijo a los efectivos policiales que se encontraban sentados en el lugar cuando el ladrón se les acercó y les exhibió un arma de fuego para quitarles los teléfonos. Fue en ese momento que comenzó un forcejeo hasta que Fernández Acosta recibió el tiro en el cráneo. “Dame el celular, ¿o querés morir?”, les dijo el ladrón. El asesino cumplió.

El delincuente que quiso sacarle el teléfono huyó inmediatamente del lugar mientras que Acosta fue trasladado al hospital Fernández, donde murió horas después.

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