Dos fiscales catamarqueños solicitaron pericias psiquiátricas de un cura párroco denunciado e imputado por delitos de abuso sexual en Catamarca. Se trata del cura párroco Eduardo López Márquez, quien fue imputado por la Fiscalía Penal de la localidad de Recreo, a cargo de Virginia Duarte Acosta, por tres hechos sucesivos de “abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores”, que habrían ocurrido entre 2002 y 2003 en perjuicio de un menor.
Además, el sacerdote está siendo investigado por una denuncia de “abuso sexual en perjuicio de un menor”, en un hecho que habría sucedido en 2002 en el departamento catamarqueño de Capayán.
Esta denuncia fue realizada en marzo de este año y está siendo investigada por la Fiscalía de Instrucción N° 9 a cargo de Jonathan Felsztyna, quien si bien, aún no resolvió en la causa, también solicitó que le realicen pericias psiquiátricas al eclesiástico.
Según informó Télam, tanto la fiscal Duarte Acosta como el fiscal Jonathan Felsztyna “solicitaron que López Márquez se presente en la jornada de mañana (por hoy) en el Cuerpo Interdisciplinario Forense de la provincia, para la realización de las pericias psiquiátricas de rigor”.
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En tanto, el abogado querellante Sebastián Ibáñez señaló que “fui notificado por ambas fiscalías sobre la realización de las pericias psiquiátricas a López Márquez en la jornada de mañana (por hoy)”, dijo.
Finalmente, las fuentes judiciales, explicaron que “los hechos por los que López Márquez fue imputado, habrían ocurrido entre los años 2002 y 2003, cuando el eclesiástico se encontraba a cargo de la casa parroquial de Recreo y aprovechando su status abusó de un niño menor de edad que concurría al lugar” y añadieron que “el segundo hecho por el que fue denunciado y está siendo investigado, habría ocurrido en el año 2002 en el departamento de Capayan”.
Cabe recordar que también en la provincia de Catamarca, en abril de 2021, la justicia provincial juzgó y condenó por primera vez a un sacerdote católico acusado del delito de abuso sexual ocurrido en 2015 en el departamento de Belén. La víctima: una joven de 16 años.
Se trató del juicio contra el sacerdote Juan de Dios Gutiérrez, quien fue juzgado por el tribunal de la Cámara Penal 3, por el delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por la condición de ser representante de un culto religioso” y finalmente condenado a 12 años de prisión.
El debate se desarrolló de manera virtual por la pandemia y fue precedido por el tribunal presidido por Patricia Raquel Olmi, acompañada por los jueces César Marcelo Soria y Jorge Rolando Palacio.
El hecho comenzó a ser investigado en 2015, cuando la madre de la víctima de 16 años, presentó una denuncia penal por abuso en la Fiscalía de Belén.
Según consta en la denuncia presentada por la madre de la víctima, “Gutiérrez dirigía un movimiento juvenil cristiano, al cual su hija ingresó en 2014 y luego de un tiempo el sacerdote habría manipulado a la adolescente para entablar una relación de índole sexual con él. No le permitía hablar con nadie, ni confesarse para no ser descubierto”.
En esta línea, Alejandra relató que, debido a la denuncia realizada contra el sacerdote, “tuvimos que salir de nuestro hogar en Belén, pero no huir, sino sacar a mis hijas de ese lugar”, recordó.
A su vez, puntualizó: “lo más terrible de la historia fue que a mi hija la tuve que dejar internada en Córdoba en el Sanatorio Morra por 45 días, por los reiterados intentos suicidios que sufrió, actualmente ella sigue con tratamiento, está contenida y medicada”, dijo.
Con información de Télam
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