El hombre que apuñaló a una bailarina del programa televisivo ShowMatch con la que estaba obsesionado y a la dueña de un estudio de danzas en el barrio de Palermo no irá a juicio, puesto que la pericia psicológica lo consideró “inimputable”.
El hecho ocurrió el 10 de noviembre de 2020 cuando el atacante Sebastián Damián Villarreal, oriundo de Berisso, llegó dos horas antes de la hora en la que iniciaba su clase en la escuela “El Club de la Danza”, ubicada en Lacroze 2090, en el límite entre Palermo y Belgrano.
Su profesora era Julieta Antón, una bailarina que participó del programa ShowMatch y bailó con artistas como Tini Stoessel, con la que Villarreal estaba obsesionado. Él la interceptó a la salida del baño y comenzó a perseguirla con una cuchilla de carnicero de 32,5 centímetros que había llevado de su casa.
En consecuencia, la joven comenzó a correr por todo el edificio hasta llegar a las oficinas administrativas, donde se encontraba Sofía Bovino, profesora y una de las dueñas del lugar.
Al llegar a la oficina, él comenzó a atacarlas a cuchilladas no solo a Antón, sino también a Bovino que intentaba proteger a la bailarina. Mientras las agredía, el hombre acusaba a Antón de haberse burlado de él luego de que le enviara unos mensajes en los que Villareal confesaba haber sido víctima de un abuso sexual. “Las voy a matar a las dos”, decía.
Tras ser alertados por los vecinos del lugar, los efectivos de la Comisaría Vecinal 14B llegaron al lugar en pocos minutos. Los policias ingresaron al lugar y comenzaron a intentar mediar con el atacante para que libere a las dos mujeres, pero él no desistía. Por esto mismo, lo redujeron al efectuar un disparo que le impactó en un glúteo.
De esta manera, se abrió una causa contra Villarreal por tentativa de femicidio, por lo que quedó detenido en el sector psiquiátrico del penal de Ezeiza. Sin embargo, tiempo después, solicitó su sobreseimiento ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°11 de la Capital Federal, organismo que debía juzarlo este año.
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Ahora, se conocieron los resultados del peritaje del Cuerpo Médico Forense (CMP), en el que concluyeron que el atacante presenta un “cuadro psicopatológico compatible con discapacidad intelectual de grado moderado con proclividad a descompensaciones psicópatas compatible con una insuficiencia de las facultades mentales y alteración morbosa de las mismas”, de acuerdo con la información a la que pudo acceder Télam.
Con respecto al momento del ataque, los peritos consideraron que “es verosímil que no haya poseído la autonomía suficiente para comprender y dirigir su conducta al momento de los hechos investigados”. Además, sostuvieron que “al momento actual no presenta indicadores de riesgo cierto e inminente para sí o para terceros”. Con estos resultados, el defensor solicitó que el hombre sea declarado “inimputable”.
Frente a esto, el fiscal Nicolás Amelotti se opuso a que sea sobreseído y solicitó que el agresor sea evaluado psicológicamente cada tres meses para ver si en algún momento vuelve a recuperar su capacidad de defenderse.
En ese sentido, alegó que existió “premeditación” en el crimen, por lo que planteó: “Todo ello resulta a mi juicio incompatible con la apodíctica conclusión de la junta médica, pues las circunstancias reseñadas permiten inferir algún grado de posibilidad de comprensión de la antijuridicidad y de posibilidad de dirigir sus acciones conforme a esa comprensión”.
A su vez, recordó que las pericias realizadas luego del hecho concluyeron que Villarreal cometió el acto estando ubicado en tiempo y espacio, razón por la cual Amelotti solicitó la intervención de una nueva Junta Médica y propuso que el juicio sea “suspendido” hasta obtener las conclusiones de las evaluaciones trimestrales que pidió.
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