Un policía mató a un ladrón e hirió a otro cuando una banda de motochorros intentó robarle su moto en la que se trasladaba por el partido de Tres de Febrero, Provincia de Buenos Aires.
El hecho ocurrió el lunes pasado cerca de las 20:30 horas sobre la calle Nuestra Señora de la Merced al 3900 en la localidad de Villa Pineral cuando un efectivo de la Policía de la Ciudad, que circulaba por civil, fue interceptado por al menos cuatro delincuentes distribuidos en tres motos.
Los ladrones acorralaron al hombre, quien dejó su rodado y comenzó a huir. Sin embargo, los asaltantes respondieron realizando disparos con armas de fuego contra su personas.
Tras correr algunos metros, el policía tomó su arma reglamentaria y mantuvo un tiroteo con los delincuentes, tal como informaron fuentes judiciales y policiales del caso a Télam. El enfrentamiento terminó con un ladrón muerto que fue identificado como Ricardo Alexis Valdez de 18 años que vivía en el barrio Carlos Gardel. El fallecido ya contaba con antecedentes penales y un pedido de detención vigente por reiterados robos, emitido por el Juzgado de Garantías N°5 de Morón.
Además, uno de sus cómplices resultó herido en la balacera, por lo que minutos después llegó al hospital Posadas con un disparo en el abdomen y otros dos en un brazo y una pierna. Al ingresar a urgencias, el ladrón contó una historia falsa a los médicos que lo atendieron, puesto que alegó haber sido víctima de un robo en Casados, razón por la cual los supuestos delincuentes lo habrían atacado, de acuerdo con la información del portal local Primer Plano.
Sin embargo, su contextura física, su vestimenta y una ojota de él hallada en el lugar permitió a los efectivos de la policía vincularlo con el hecho. En consecuencia, quedó bajo custodia como sospechoso de haber participado en el asalto contra el oficial. Se trata de Gabriel Nicolás Giménez de 24 años, quien también cuenta con un historial penal.
La causa quedó a cargo del fiscal Favio Cardigonde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 del Departamento Judicial de San Martín. En el lugar, los investigadores encontraron once vainas servidas y el arma reglamentaria del efectivo porteño.
El arma del oficial quedó secuestrada para ser peritada en el marco de la investigación por homicidio agravado por uso del arma de fuego, pero el oficial quedó en libertad, puesto que la Fiscalía consideró que se trató de un acto en legítima defensa. El sospechoso aprehendido quedó imputado por el delito de robo agravado en grado de tentativa. Los demás motochorros permanecen prófugos de la Justicia.
Motochorros en banda, una constante en el Conurbano
Esta modalidad de robar en grupo y movilizarse en motos es cada vez más común en el Oeste del Conurbano bonaerense. A comienzos de marzo, tres motos conducidas por delincuentes asaltaron a un hombre en Morón. Pese a que la víctima le entregó su vehículo, los ladrones dispararon e hirieron al hombre.
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Días antes, un hecho similar se registró en Merlo, pero, en esta oportunidad, uno de los delincuentes terminó muerto. Durante la madrugada del domingo 6 de marzo, dos motochorros quisieron robarle a un hombre mientras esperaba el colectivo en la avenida Doctor Ricardo Balbín, amenzándolo con un revolver calibre 32.
Para la sorpresa de los delincuentes, el hombre tomó su propia arma de fuego y comenzó a disparar, por lo que uno de los ladrones recibió un disparo en el tórax y otro en el antebrazo. El motochorro caminó unos pocos metros y se desmayó intentando llegar al hospital Héroes de Malvinas. Los investigadores no pudieron dar con el tirador, quien escapó inmediatamente después.
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