Un ex policía de 45 años fue detenido acusado de cometer el femicidio de Sofía Belén Vicente, la joven de 22 años que, este jueves, fue encontrada asesinada en un pozo ciego de un campo en el partido bonaerense de Olavarría, informaron fuentes del caso a Télam.
Se trata de Pablo Martín Olalde, quien se negó a declarar ante la fiscal Paula Serrano, cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 descentralizada en ese distrito, quien lo imputó por el delito de homicidio agravado por alevosía y violencia de género.
A su vez, voceros policiales indicaron que hay otro sospechoso que se encuentra prófugo y es intensamente buscado por las autoridades.
En tanto, familiares de la víctima convocaron a una manifestación para exigir justicia por Sofía, frente a la fiscalía de Olavarría, ubicada sobre la calle Rufino Fal al 2900.
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Esta movilización se realiza luego de que el pasado viernes unas cinco mil personas participaron de una marcha, convocada por la Casa de la Mujer de Olavarría, en la que pidieron que se capture a los asesinos de Sofía.
“Señor, señora, no sea indiferente, nos matan a las pibas en la cara de la gente”, fue uno de los cánticos de los familiares y vecinos de la víctima, que marcharon con banderas negras y carteles con la foto de la joven, bajo la consigna “Olavarría, ciudad del horror”.
El hallazgo del cuerpo de la víctima, quien había sido vista con vida por última vez durante el Festival de Doma y Folclore realizado el fin de semana en Olavarría, ubicado en el centro-sudoeste de la provincia de Buenos Aires, ocurrió el jueves en un predio situado en avenida Del Valle, prolongación Oeste, camino a Crotto.
Dos personas que trabajaban en la zona avisaron a la Policía a raíz de un olor nauseabundo que provenía de un pozo de dos metros de profundidad, por lo que personal de la comisaría local se presentó de inmediato.
Los efectivos constataron que adentro había un cadáver, que resultó ser el de Sofía, buscada desde el fin de semana tras una denuncia de su familia por averiguación de paradero.
Según fuentes del expediente, la fiscal Serrano, supervisó el procedimiento. Los peritos observaron lesiones en el cuerpo de la víctima que pudieron haber sido provocadas por terceros y determinaron que se trató de un femicidio.
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El informe preliminar de la autopsia que recibió la fiscal de la causa indicó que la víctima tenía signos de ahorcadura a lazo, es decir con un cable o una soga, además del disparo en la nuca.
Sin embargo, los forenses establecieron que el deceso probablemente se haya producido a raíz del disparo, ya que la autopsia confirmó que al momento de ser efectuado Sofía estaba viva.
Además, sus piernas estaban atadas y sus ojos vendados, lo que indicaría que el ataque pudo haber sido cometido por más de una persona dada la posible resistencia.
Por último, los peritos también establecieron que no se hallaron signos de abuso sexual.
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