La etapa final del juicio contra Matías Farías (29) y Juan Pablo Offidani (47), los acusados de abusar y provocar la muerte de Lucía Pérez (16) en 2016 en Mar del Plata, comenzará este jueves, aproximadamente a las 9, cuando tome el micrófono el fiscal Leandro Arévalo y se convierta en el primero en exponer su alegato de cierre del debate oral en el sexto piso de los tribunales.
Luego, probablemente antes del mediodía, Verónica Heredia y Florencia Piermarini, abogadas de la familia de la víctima, completarán con su argumentación ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°2 marplatense las razones para sostener desde la parte acusadora que los imputados deben ser considerados culpables del delito de “abuso sexual con acceso carnal, agravado por el suministro de estupefacientes seguido de muerte en concurso ideal con femicidio”, que contempla una pena de reclusión perpetua.
Ambas partes -fiscal y abogadas del particular damnificado- centrarán las razones de sus alegatos en la disparidad de poder que había entre Farías y Pérez: una menor que conoce a su vendedor de drogas, que en ese momento tenía 23 años recién cumplidos, en la puerta de su escuela y que al día siguiente va a su casa, invitada para tener relaciones sexuales, y muere -o es asesinada- tras consumir cocaína.
A pesar de que el consentimiento está contemplado para personas desde los 16 años de edad en el Código Penal, tanto Arévalo como las abogadas de la familia Pérez Montero considerarán la asimetría como un aspecto clave para persuadir a los jueces Gustavo Fissore, Alexis Simaz y Roberto Falcone, quienes tendrán que tomar una decisión y comunicar su veredicto (sin fecha estimada aún).
Las partes acusadoras probablemente reclamarán en sus alegatos que el Tribunal (compuesto enteramente por hombres) aplique perspectiva de género en el análisis de los hechos y las circunstancias. Eso quiere decir que mire los acontecimientos más allá de las pruebas materiales.
Te puede interesar: Etapa final del juicio por Lucía Pérez: las claves del debate, entre la junta médica y el “consentimiento
Es que se trata de un caso emblemático en la lucha feminista: el primer paro nacional de mujeres fue consecuencia de este hecho y la decisión de hacerlo se tomó después de que la fiscal de instrucción, María Isabel Sánchez, difundiera en su momento que Lucía había sido empalada. Aunque después se supo que eso no ocurrió, incluso en la actualidad hay una parte de la opinión pública que todavía cree que el ataque sexual se dio de esa manera.
Perspectiva de género es algo que, evidentemente, no tuvo el fallo redactado por el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Mar del Plata en noviembre de 2018, cuando los magistrados Facundo Gómez Urso, Pablo Viñas y Aldo Carnevale absolvieron a los imputados del delito de abuso sexual seguido de muerte y los condenaron por la venta de drogas. La decisión provocó la anulación de la sentencia por parte de la Cámara de Casación y la orden de hacer un nuevo juicio, sin incorporación de nuevas pruebas.
Te puede interesar: Caso Lucía Pérez: por qué los jueces sostienen que no hubo abuso sexual ni femicidio
Los jueces de aquel juicio argumentaron, no sin pasajes con tinte misógino, su fallo absolutorio en cinco aspectos: el mal desempeño de la fiscal María Isabel Sánchez, la vida privada de Pérez, los chats que la chica tuvo con sus amigas y con el más joven de los imputados en las horas previas al hecho, los resultados de la autopsia y la actitud de Farías durante la relación con Lucía y después de su muerte: desde que la invitó a tomar una chocolatada hasta que se quedó en la unidad sanitaria donde la atendieron y colaboró con la Policía para ubicar a la familia de la chica y devolverle las pertenencias que habían quedado en su casa.
En principio, las partes acusadoras quedaron conformes con este segundo juicio porque “pudo situarse el debate en el hecho y no en la vida íntima de la víctima”.
Para el fiscal y las abogadas de la familia quedó claro que hubo una “falsa existencia de consentimiento” y que aquello que se desplegó como un hecho consentido no fue tal, y se demostró con las fatales consecuencias, es decir, con la muerte de Lucía.
Los alegatos precisan de la pericia dialéctica, casi teatral, de los protagonistas. Hay algunos ejemplos célebres que han tenido una trascendencia clave en la decisión final del Tribunal.
Este jueves se verá la capacidad de Arévalo y de la dupla Heredia-Piermarini para contrarrestar con el concepto esencial de la perspectiva de género, el poder de las pruebas materiales que, sostienen las defensas de los acusados, no compromete a Farías y Offidani ya que, según la Junta Médica que analizó la autopsia, Pérez murió como consecuencia de la ingesta de cocaína y sin lesiones compatibles con una agresión sexual.
Los alegatos, que arrancan este jueves y continuarán el martes 28 con las defensas de Farías (la defensora oficial María Laura Solari) y de Offidani (César Sivo), se podrán seguir en vivo a través de la cuenta de YouTube de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires.
Seguir leyendo: