La secuencia, muy violenta, quedó registrada en las cámaras de seguridad de José Ingenieros al 1.900, en las inmediaciones del estadio el Gigante de Arroyito, en Rosario. Ocurrió el sábado pasado, mientras Rosario Central enfrentaba a Arsenal. Una pareja fue víctima de un asalto brutal: el delincuente que les robó el auto los baleó y el hombre está grave.
No estaba solo el ladrón: lo acompañaba uno de sus hijos, el joven que en las imágenes que encabezan esta nota se moviliza en silla de ruedas. Ambos están detenidos.
El principal sospechoso del robo y el ataque al matrimonio es un interno de una cárcel provincial santafesina que, este miércoles, fue imputado como autor del robo del coche. El asalto lo cometió durante una salida transitoria, informaron fuentes judiciales a la agencia de noticias Télam.
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El fiscal rosarino Alejandro Ferlazzo reveló este miércoles a la prensa que “el imputado, que cumple una condena en una cárcel provincial, había salido el sábado en el marco del régimen de salidas transitorias, una situación legal”.
El funcionario detalló que ese día cometió el robo del auto al matrimonio “con la participación de su hijo, que también fue detenido, quien se movilizaba en una silla de ruedas por una herida que sufrió en un hecho delictivo, que le ocasionó una discapacidad transitoria”.
“En principio fueron a robar el auto que encontraron por casualidad, esto fue un robo y no un conflicto”, detalló el fiscal Ferlazzo. Y agregó: “En una filmación se ve al interno que ataca al hombre, después sale de la imagen, pero vuele y le dispara, y lo mismo hizo con la mujer, a la que le robó el bolso y escaparon con el auto”.
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El robo del auto ocurrió el sábado en una casa de la calle José Ingenieros al 1900, del barrio Industrial, y “el vehículo fue hallado enseguida por la Policía santafesina a las pocas cuadras, en la casa del hijo (del sospechoso), con una parte trasera dañada, pero sería un daño anterior al robo”, advirtió Ferlazzo.
La mujer, que fue víctima del robo, fue herida de bala en una pierna y se encuentra fuera de peligro; mientras que su marido se encuentra en grave estado internado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
El caso se conoce luego de una semana en la que ha quedado en evidencia la grave situación que vive Rosario, por la cantidad de homicidios y los hechos de violencia vinculados al narcotráfico, con cruces entre dirigentes y hasta el cambio del ministro de Seguridad de la provincia.
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En ese marco, este martes, el Arzobispado de Rosario emitió un comunicado refiriéndose al tema. La declaración fue titulada Una injusticia que clama al cielo, en referencia a las palabras del papa Pablo VI (junio 1963 - agosto 1978) pronunciadas el 26 de marzo de 1967 en su carta encíclica popolorum progressio.
Al respecto, el Arzobispado de Rosario, tomó las primeras palabras de Pablo VI y enunció: “Nuestra dignidad es desconocida y vulnerada”. “No solamente por la pobreza que castiga a grandes sectores, sino también por la violencia que nos angustia”, agregó.
La declaración apunta a que “en este Año Mariano Arquidiocesano pedimos a nuestra Madre del Rosario que inspire a toda la ciudadanía, pero especialmente a la dirigencia política, económica y social para que, dejando de lado intereses y mezquindades, arriben a los consensos imprescindibles que deberán ser la base de esas políticas públicas lúcidas, decididas y valientes a implementar”, haciendo foco en los magistrados y funcionarios actuales “elegidos democráticamente”.
“Sólo así se podrá lograr la Paz tan largamente anhelada que posibilite la convivencia fraterna que nos merecemos”, finaliza el comunicado.
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