Los padres de Natalia Melmann, la adolescente de 15 años asesinada en la localidad balnearia de Miramar en 2001, pidieron hoy que no se les otorgue la libertad anticipada a dos de los ex policías condenados por el crimen. El pedido ocurrió en una audiencia en la Cámara de Apelaciones de Mar del Plata, solicitada por la defensa de dos de los detenidos, Oscar Echenique (61) y Ricardo, alias “Rambo” Anselmini (53). En los próximos días la Justicia deberá resolver si les otorga o no el beneficio a los sentenciados.
“No puedo creer que puedan salir en libertad, sabemos que si salen volverán a cometer delitos en Miramar”, sostuvo Gustavo Melmann, padre de la adolescente, en diálogo con los medios de prensa que lo esperaban en la puerta de los tribunales situados en Tucumán a 2450, de Mar del Plata, donde participó de la audiencia.
Te puede interesar: A 20 años del juicio por el femicidio de Natalia Melmann: amenazas al padre y sospechosos todavía libres
Y siguió: ”El problema es que torturaron, violaron, mataron y la tiraron como basura a una jovencita de quince años y saldrán en libertad, estoy devastado”. En tanto, Laura Calampuca, madre de Natalia, se mostró indignada: “Acabo de escuchar muchas mentiras, siento que me acaba de atropellar un tren”, agregó.
“Lo único que sé es que hace 22 años que no veo a mi hija y yo lo que quiero es bailar, abrazarla, pero su lugar es muy reducido. No soy creyente, pero si Dios existe estos tipos no merecen ni el perdón de Dios”, manifestó la madre entre lágrimas. Y dijo que los ex policías condenados “no pueden volver a salir”, ya que “son dos asesinos, no pidieron perdón, dicen que no lo hicieron y los ADN que encontraron en el cuerpo eran de ellos”.
La defensora de los ex policías, Patricia Perello, dijo a la agencia de noticias Télam: “Ambos reúnen las condiciones para recibir la libertad condicional”.
”Los informes del Servicio Penitenciario son favorables, tienen buen concepto, nunca tuvieron infracción, tienen conducta ejemplar y ya cumplieron el tiempo legal que establece la Ley y es lo que deben hacer”, afirmo la letrada”. Y concluyó: “Los jueces resolverán en el plazo de los cinco días hábiles”, estimó.
Te puede interesar: Los policías que violaron y mataron a Natalia Melmann fueron beneficiados con salidas transitorias
El femicidio ocurrió en la madrugada del 4 de febrero de 2001, cuando Natalia fue obligada a subir a una camioneta de la Policía bonaerense y llevada a una casa ubicada en el extremo sur de la ciudad bonaerense de Miramar. En esa vivienda, fue torturada y accedida carnalmente y luego estrangulada con el cordón de una de sus zapatillas.
Además de Echenique y Anselmini también fue condenado a perpetua como coautor del femicidio otro policía, Ricardo, alias “El Mono” Suárez (58), y a los tres les atribuyeron los delitos de “rapto, abuso sexual con acceso carnal agravado por la pluralidad de personas y homicidio criminis causa”.
Los tres policías trasladaron luego el cuerpo al vivero Florentino Ameghino, donde trataron ocultaron al taparlo con un montículo de hojas, pero fue hallado cuatro días más tarde durante uno de los tantos rastrillajes que se realizaron por esa zona.
El crimen provocó la reacción de la comunidad local, que encabezó junto a los familiares y allegados de la adolescente múltiples marchas para pedir por el esclarecimiento del caso y produjo incluso un impacto político: el entonces presidente, Fernando De la Rúa, se reunió pocos días después con los padres de la víctima en Miramar.
En septiembre de 2002, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Mar del Plata condenó a Echenique, Anselmini y Suárez a perpetua y a 25 años de cárcel al ex convicto Gustavo “Gallo” Fernández, por su participación en el secuestro, aunque la pena fue reducida luego a 10 años de prisión.
En junio de 2018 se celebró un nuevo juicio a un cuarto policía, Ricardo Panadero (63), imputado como coautor de privación ilegítima de la libertad por el uso de violencia, abuso sexual agravado por acceso carnal y por el concurso de dos o más personas, y homicidio doblemente agravado por haberse cometido para lograr la impunidad de los coautores de un delito anterior.
Panadero fue absuelto en ese proceso porque los jueces consideraron que no pudo acreditarse la acusación, pero el fallo fue apelado por la fiscalía y por el abogado de la familia de Natalia.
El 13 de noviembre de 2019, la Sala III del Tribunal de Casación bonaerense anuló esa absolución y ordenó la realización de un nuevo proceso, que esta previsto que se designe una nueva fecha para este 2023.
Seguir leyendo