Este miércoles, la madre del bebé prendido fuego y asesinado en Rafael Castillo declaró en juicio oral que una de los imputados “se reía” cuando la roció con combustible y que, luego de ello, le arrojó “dos veces” líquido inflamable a su hijo, al que vio cómo se prendía fuego, en el trágico hecho ocurrido en 2021. El testimonio tuvo lugar durante el proceso en contra de los tres imputados por el escabroso hecho.
El debate comenzó alrededor de las 11 de ayer ante el Tribunal Oral en lo Criminal 2 de La Matanza, integrado por los jueces Lucila Pacheco, Arturo Gavier y Diego Burgueño. Los acusados llegaron todos en calidad de detenidos: Agustín Sebastián Sayago, Liz Magnolia Ortega Castillo, alias “La China”, y Alberto Rodolfo Gerasimchuk, alias “Chucho”.
El único de los tres acusados en declarar ante los jueces fue Sayago, quien aseguró haber tenido una breve relación con la víctima, Laura Abril Delgadillo, madre del bebé fallecido Liam Benjamín Sánchez de 1 año de edad. Si bien dio una versión sobre el hecho, se mostró ajeno al ataque.
Tras la indagatoria, el tribunal convocó a Delgadillo, quien brindó un testimonio crudo del episodio que comenzó cerca de las 20 del 19 de septiembre del 2021, cuando salió a “tomar algo” con Sayago, y finalizó cerca de las 2 de la madrugada del día siguiente, con el ataque contra ella y su hijo.
La mujer dijo que cuando regresó a su vivienda a bordo de la moto de Sayago fue sorprendida por “La China” Ortega Castillo, a la que consideraba una “amiga”, quien primero la “cortó con algo filoso en un brazo” y agregó que “en ese momento sentí como un viento” y tras lo cual, su atacante le “tiró un líquido” que por el olor creyó que era combustible.
“Ella se reía, después de tirarme a mí, le tiró dos veces al bebé”, indicó la víctima, y agregó que “gracias a tres hombres que estaban en el lugar se revolcó en un charco de agua” y así pudo apagar las llamas que la quemaban, al tiempo que gritaba por su bebé, al cual había tenido que dejar en el piso cuando empezó el ataque.
“Mi bebé se está prendiendo fuego”, afirmó la mujer y recordó que gritó desesperada y que instantes después vio cómo esos “muchachos” sacaron “una bola de fuego”, que envolvía al bebé y “lo apagaron” al borde de la calle donde había agua.
En tanto, por la tarde de ayer declararon tres testigos propuestos por las partes acusadoras: dos de los hombres que asistieron a Delgadillo y un oficial de la policía bonaerense que revisó las cámaras de seguridad de un kiosco cercano a la escena del crimen que registró el ataque.
El tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta hoy cuando se reanudará el debate con testigos de las defensas.
En el juicio, Delgadillo está representada por los abogados Miguel Racanelli y Yair Fernández, quienes adelantaron a la agencia Télam que van a pedir prisión perpetua para los tres acusados.
Los letrados están “convencidos de la responsabilidad penal que le corresponde a la homicida que se llevó la vida de una criatura sin tener miramiento absolutamente por nada” y a los dos hombres que actuaron “a sabiendas de lo que iba a hacer la homicida”.
Por su parte, Castillo está representada por la defensora oficial Cecilia Pagliuca Crespo, Gerasimchuk por el abogado Néstor Verri y Sayago por el letrado Miguel Froncillo.
El fiscal del juicio, Sergio Alejandro Antín, dijo que los tres sospechosos están acusados de “homicidio calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas y homicidio calificado por alevosía en concurso premeditado de dos o más personas y por relación de pareja (únicamente para Sayago) en grado de tentativa, los dos en concurso material, el hecho consumado respecto del bebé y el hecho tentado respecto de Delgadillo, que sobrevivió”.
Según la investigación que llevó adelante el fiscal de Homicidios de La Matanza, Federico Medone, el ataque a Delgadillo y su bebé se produjo en medio de una trama de celos y traiciones entre los acusados que actuaron con “alevosía”.
Para la fiscalía, los imputados “perpetraron el hecho mediante un plan ideado, con el acuerdo premeditado, destinado a provocar el fallecimiento de las víctimas a través de la división funcional de tareas”.
De acuerdo al relato de testigos, al momento del ataque Sayago era pareja de Delgadillo, y planeó agredirla junto a su ex novia, Castillo, y el actual novio de ésta, Gerasimchuk. Para los investigadores, fue Sayago “quien generó un encuentro previo y la puesta en estado de indefensión de ambas víctimas -basado en la relación de confianza por ser pareja de Delgadillo- entregándolos de ese a modo a Ortega Castillo, quien roció y prendió fuego a las víctimas”.
Y según el requerimiento de elevación a juicio, Castillo “contaba a su vez con el accionar coordinado de Gerasimchuk (su actual pareja), cuyo rol consistía en conducir el rodado hasta el lugar del hecho y aguardar en dicho sitio para mayor seguridad y luego huir ambos en el vehículo en el que se desplazaban”.
Cabe recordar que el hecho ventilado en el debate ocurrió a la 1.50 del 19 de septiembre de 2021, frente a una vivienda ubicada en la calle Sudamericana al 2100, de Rafael Castillo, donde residían Delgadillo junto a su hijo Liam.
Hasta allí llegaron en una moto conducida por Sayago y apenas descendieron, una mujer se les acercó por sorpresa, roció con combustible a madre e hijo y los prendió fuego, para luego escapar en una camioneta negra que se hallaba estacionada a pocos metros con un hombre al volante.
Seguir leyendo: