El martes pasado por la noche, Jorge Carlos Rithner, un hombre de 67 años de la ciudad bonaerense de Baradero, fue asesinado a golpes a manos de un motoquero con el que tuvo una violenta discusión de tránsito, después de un choque muy leve. La víctima fue atacada el sábado pasado pero no pudo recuperarse de las heridas en la cabeza y finalmente murió tres días después. El agresor, un joven de 21 años, está detenido.
El accidente se produjo cuando Rithner, quien iba a bordo de un Volkswagen Polo, frenó en el semáforo de la esquina de las calles Anchorena y Santa María de Oro y su vehículo fue impactado por detrás por el joven que se movilizaba en una motocicleta Keller de 110cc. Casi de inmediato, ambos comenzaron una discusión porque el motociclista no tenía el seguro correspondiente. El entredicho escaló rápidamente, hasta que el jubilado recibió un golpe de puño en el rostro -debajo del mentón- por parte del motoquero, cayó al piso y su cabeza impactó contra el cordón.
El resultado: fractura de cráneo y una afección neurológica de complejidad, según confirmó el subsecretario de Seguridad de Baradero, Sergio Lucero, en diálogo con Radio Cuarentena.
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La confirmación de la muerte de Rithner, al que su familia y amigos apodaban “Mochi”, causó impacto en la ciudad y obviamente en sus personas más cercanas. A través de las redes sociales, Virgina y René, dos de sus tres hijos, le dedicaron mensajes sentidos para despedirlo. “Ibas con ellos, con tus dos amores más grandes. Y ahora el abuelito Jorge no vuelve... te amo pa”, escribió la mujer, quien acompañó el posteo con una foto de Jorge con sus dos pequeños.
Mientras agonizaba, la hija aprovechó su perfil de Facebook para expresar la angustia que le generó el violento episodio y dar a conocer cierta resignación porque sabía que el desenlace fatal era prácticamente inevitable. “No vas a despertar... solo hay que esperar que tu corazón se detenga. Te amo por siempre”, dijo
René, quien vive en Brasil, escribió: “Te amo y te extraño mucho papi. La ultima foto eras re feliz. Volá alto”.
Hincha de Boca y casado con Marinalva Barbosa da Silva, una mujer de origen brasileño, “Mochi” -de acuerdo con registros oficiales- tenía como actividad principal el cultivo de cereales y hasta 2017 figuró como empleado de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires.
La información policial indicó que después de la golpiza, el hombre tuvo que ser internado en la Unidad de Terapia Intensiva (U.T.I.) del Hospital Doctor Lino Piñeyro, en Baradero, pero a raíz de la gravedad del cuadro, el paciente debió ser derivado al Hospital San Felipe, situado en la zona de San Nicolás.
“Lo que sucedió fue algo muy lamentable”, dijo el subsecretario. “Tuvo tanta mala suerte que golpeó su cabeza contra el cordón. Es un tema que debió resolverse en el momento. No hubo un daño patrimonial. No hubo rotura ni de la moto ni del auto. Tampoco hubo lesión en los conductores”, agregó.
El agresor, oriundo de Pérez Millán, quedó detenido el mismo día del hecho por orden del fiscal Hernán Granda, de la UFI Nº8 de Baradero, quien en ese momento lo imputó por el delito de lesiones graves. Sin embargo, con la confirmación del fallecimiento de Rithner, el funcionario judicial calificó la causa como homicidio. En los próximos días el juez de Garantías resolverá si lo convalida o considera que debe ser imputado por un delito menos gravoso. Además, se espera conocer el resultado de la autopsia para saber si murió producto de la piña o del golpe contra el cordón.
En ese sentido, Lucer aclaró que hay una filmación del episodio que ya está en poder de la Justicia y que también hay testigos de lo ocurrido. Los dos elementos indicarían que el motoquero fue quien golpeó al jubilado y desencadenó la tragedia. “Existe una grabación que se está analizando para resolver el caso”, confirmó el secretario.
Con información de Télam
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