Rosario continúa con la escalada de violencia. Este jueves por la tarde, un joven fue asesinado de múltiples disparos en la zona Noroeste de la ciudad, y en el mismo ataque otro chico quedó en un estado crítico después de haber sido herido de un tiro en el pecho. La causa es investigada por el fiscal Gastón Ávila, quien no pudo llegar al lugar por el tenso ambiente que había en la cuadra del crimen, donde se registraron hasta incidentes con la Policía.
El departamento Rosario acumula 263 homicidios dolosos en lo que va del año, según el Observatorio de Seguridad Pública, organismo provincial integrado por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación. La cifra negra dicta que la ciudad quedó a un hecho de alcanzar el triste récord de 2013, cuando hubo 264 asesinatos, y aún faltan 30 días para fin de año.
El último crimen ocurrido en Rosario fue perpetrado en inmediaciones de Juan B. Justo y Campbell, en barrio Empalme Graneros, uno de los territorios más calientes de la ciudad. Se presume que los gatilleros eran dos y efectuaron los disparos desde una moto negra.
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La principal víctima de los disparos fue Miguel Ángel Benegas, de 22 años, que ingresó muerto al Hospital Alberdi. Al lado suyo fue herido Leonel Benjamín G., de 19, quien sufrió una herida de arma de fuego en el tórax y quedó internado en el Hospital Eva Perón de la vecina localidad de Granadero Baigorria.
Leonel G., por la información a la que accedió Infobae, fue derivado a la unidad de terapia intensiva por un neumotórax, por lo que su pronóstico era reservado.
Los dos jóvenes estaban en la vereda, cuando los sicarios pasaron a los tiros, por los indicios que obtuvo la División de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal. Cuando llegó la Policía, según los primeros datos, tuvo que pedir refuerzos porque había tensión y algunas personas manifestaron su enojo por la demora en el traslado de las personas lesionadas.
La propia Policía, y hasta equipos periodísticos que se habían dirigido al lugar para obtener información sobre el caso, fueron echados a piedrazos. Tal fue el ambiente hostil que los peritos forenses no pudieron preservar la escena del homicidio, de acuerdo a la información preliminar brindada por fuentes del Ministerio Público de la Acusación.
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Familiares y allegados de los jóvenes baleados fueron citados a declarar en el Centro de Justicia Penal para aportar datos a la investigación que lleva adelante la unidad fiscal de Homicidios Dolosos.
Un drama que no cesa
Sin embargo, no fue la única balacera de ese día. En Washington y Miller, en la zona Norte, fue atacada una joven de 20 años que fue derivada al Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria con un impacto de arma de fuego en la oreja derecha y en el costado derecho del abdomen. Tuvo que ser llevada a quirófano de urgencia y su pronóstico era reservado al momento de la redacción de esta nota.
En la noche de este miércoles, en Campbell al 3900, en la zona oeste, fue baleado un joven de 27 años, quien recibió un disparo en la espalda. La víctima quedó internada en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez con pronóstico reservado.
Días antes hubo otros dos heridos en balaceras. Uno de los ataques ocurrió en Uriarte y Colombres, en barrio Godoy, donde un joven de 26 años sufrió heridas de arma de fuego en el rostro y en el abdomen. El otro, de 44 años, recibió cuatro disparos en inmediaciones de Presidente Quintana y Avellaneda, en Vía Honda, y fue trasladado en estado crítico al Heca.
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