El padre de un pesado de Rosario cayó por el crimen del sindicalista: la pista de las patentes robadas

El padre de un conocido delincuente de Rosario fue detenido este martes por estar al volante del Fiat Palio que se utilizó el viernes 18 de noviembre para asesinar a tiros a Mauricio Cordara, el dirigente de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) que fue acribillado de ocho tiros en la localidad bonaerense de Colón. Se trata de Ramón Vallejos, padre de Hernán Ramón “Lichy” Romero, condenado como líder de una asociación ilícita dedicada a cometer entraderas, usurpaciones, balaceras y extorsiones.

Además, otro sospechoso de 30 años fue allanado y arrestado en la zona Noroeste de la ciudad y con aparente vinculación con el plan criminal.

Ramón Vallejos fue interceptado en un operativo conjunto realizado por la División de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal y la DDI de Colón. El Fiat Palio fue frenado en inmediaciones de Provincias Unidas y Montevideo, en barrio Belgrano, en la zona Noroeste, e inmediatamente se aprehendió al conductor.

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El procedimiento se logró a partir de que el fiscal Matías Edery, de la Agencia de Criminalidad Organizada, lanzó un alerta a la Municipalidad de Rosario, que a través de las cámaras de videovigilancia le hicieron un seguimiento al auto en tiempo real para informar su recorrido. El fiscal de Rosario colabora con la causa que investiga Magdalena Brandt de la localidad de Colón.

El Fiat Palio rojo fue seguido durante todo el trayecto realizado después del homicidio. En primer lugar, salió de Colón y tomó la ruta provincial 50. Luego, se detectó que el vehículo se desplazó por la ruta 178, en sentido hacia la localidad de Bigand, y después circuló por la ruta santafesina 14, en dirección a Rosario.

De acuerdo a datos que trascendieron del operativo, Vallejos argumentó que desconocía que ese auto era buscado por la Justicia y agregó que lo había adquirido recientemente, por lo que podría tratarse de un “auto gemelo”. No obstante, será llevado a audiencia imputativa este jueves en el Centro de Justicia Penal, donde se le atribuirá al menos el delito de encubrimiento.

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Lo cierto es que el Fiat Palio rojo tenía patentes que fueron robadas a otro de la misma marca y modelo de la localidad de Monte Grande, en el partido bonaerense de Esteban Echeverría. Esa información surge de la denuncia hecha el 30 de agosto pasado por la dueña del auto sustraído.

El hijo de Ramón Vallejos es famoso en el hampa de Rosario. “Lichy” Romero (31 años) –quien lleva el apellido de su madre– purga una condena a 7 años y 4 meses de prisión por haber sido considerado líder de una banda que opera en el barrio Nuevo Alberdi, en la zona Norte, territorio que disputa con células de Los Monos.

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Romero también afronta un pedido de 28 años de prisión. Según la acusación del fiscal Patricio Saldutti, es por haber ordenado el 4 de abril de 2020 el secuestro de un integrante de Los Monos, a quien luego hicieron bajar a la vera de la ruta 34 y le dispararon una ráfaga de tiros que lo dejaron malherido. La planificación, de acuerdo a la teoría del caso, la hizo desde la unidad penitenciaria Nº6, a través de una videollamada de Whatsapp con quienes ejecutaron el plan.

Junto a Ramón Vallejos estará sentado en el banquillo de los acusados Blas Ángel Jonatan S., alias “El negro Blas”. Es quien cayó detenido este martes en un allanamiento realizado en calle 1.476 a la altura del 1300, en barrio Empalme Graneros, una de las zonas más calientes de Rosario este año.

Se presume que “El negro Blas” es quien guardó el Fiat Palio en una cochera, de donde luego salió el auto directamente para perpetrar el crimen mafioso en Buenos Aires.

Por su parte, el autor material del crimen, que quedó filmado mientras acribillaba al dirigente de la Uatre, todavía no fue detenido. Hay varias medidas investigativas en curso para poder dar con él. Se sospecha que también es de Rosario.

El homicidio se dio en el marco de las elecciones gremiales de la Uatre, donde el chaqueño José Voytenco busca la reelección y el ex diputado nacional Pablo Ansaloni pretende quedarse con la conducción. Justamente, en este contexto, Mauricio Cordara, chofer de Ansaloni, fue asesinado a tiros frente al hijo del dirigente opositor que aspira a ser el secretario general del sindicato de peones rurales.

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