Si bien por el momento solamente están imputados por “lesiones y resistencia a la autoridad”, son varios los escenarios legales que podrían llegar a enfrentar los familiares de la fallecida futbolista Juliana Gómez, quienes atacaron salvajemente a golpes a Ricardo Ernesto López, dirigente del club Argentino de Merlo, y ahora podrían recibir penas que van desde pocos meses de cárcel hasta la prisión perpetua.
Así lo aseguraron a Infobae un grupo de abogados penalistas que analizaron el caso y explicaron los posibles delitos por los que podrían ser acusados los agresores, quienes ingresaron al Hospital de Baradero, donde estaba internado el hombre luego del accidente automovilístico en el que perdió la vida la deportista, y le pegaron. Todo el hecho quedó grabado por las cámaras de seguridad del lugar y la víctima murió nueve días más tarde.
Para Adrián Tellas, según los resultados de la primera autopsia realizada al cuerpo de López, la cual da cuenta de un paro cardiorrespiratorio producto de una infección pulmonar, “aparentemente su deceso no sería causa directa de los golpes que recibió”.
Sin embargo, aclaró que todavía podrían solicitarse nuevos estudios médicos con el objetivo de determinar si esa infección “fue producto del accidente, porque alguna parte del auto lo perforó cuando chocaron, por ejemplo, si se la provocaron los golpes de los familiares o si se la contagió de forma intrahospitalaria”.
“Si se llegara a confirmar que fue producto de las lesiones que le generaron estas personas, en principio se trataría de un homicidio simple porque, por más bronca que tuvieran o justo que hayan creído que era ese accionar, no hay emoción violenta que se pueda argumentar, ya que eso exige una relación de tiempo entre el hecho original y la reacción que es incompatible en este caso, en el que todo pareciera haber estado premeditado”, señaló.
En ese escenario hipotético, los familiares de la futbolista podrían recibir una pena que va de los 8 a los 25 años de cárcel, aunque, debido a que fueron más de tres los agresores, también se podría aplicar la agravante de concurso real, lo que elevaría la sentencia a prisión perpetua.
Además, el letrado señaló que, tal como quedó grabado por las cámaras del hospital, el ataque fue cometido “con alevosía, a traición y sobre seguro, es decir, valiéndose de la imposibilidad que tiene el otro de defenderse, ya que estaba postrado en una cama”, lo que también implica la prisión perpetua.
Por otra parte, de acuerdo con lo que detalló Tellas, si se mantiene solamente la imputación de lesiones porque no se logra probar un vínculo entre el ataque y la muerte del hombre, “se tendría que definir si estas son leves, graves o gravísimas, para entonces poder establecer las penas correspondientes”, que tendrían un mínimo de un mes de cárcel, en el mejor de los escenarios, y un máximo de 10 años, en la peor de las situaciones.
“Igualmente, las lesiones se agravan por las mismas causales que el homicidio, por lo que habría que analizar si en este supuesto también se podría aplicar el concurso premeditado, por haber sido cometido por dos o más personas, lo que por se condena con la prisión perpetua, no hace falta probar la alevosía”, agregó.
Por su parte, el también abogado penalista Hugo López Carribero, reconocido en el último tiempo por haber defendido a la empleada doméstica que estuvo involucrado en el caso del doble crimen de Vicente López, aseguró que sigue de cerca la investigación por la muerte del dirigente de Argentinos de Merlo y que cree que “podría haber imputaciones de otros tipos de delitos pendientes” para los familiares de la futbolista.
“Si esto ocurre, deberían ser convocados en los próximos días para ser notificarlos. Podría haber habido amenazas coactivas, coacción, homicidio simple, la Fiscalía es la que debe determinar eso. Pero para esto tendría que comprobarse que existe un nexo entre las lesiones y el fallecimiento del hombre, por más que sea diferido, es decir, que haya muerto varios días después del ataque”, precisó.
Asimismo, el letrado advirtió que “lo que también se va a tener que establecer claramente es si la atención que se le dio en el hospital fue la adecuada, porque si las lesiones le generaron la muerte, pero no se le dio el tratamiento adecuado, también podría haber homicidio culposo por parte de los de médicos” y, en ese caso, “la responsabilidad de los agresores queda desdibujada”.
“Después existe otra figura que sería una intermedia y que es la de homicidio preterintencional, que es cuando, por ejemplo, una persona le pega a otra y esta termina muriendo. Esto ocurre muchas veces, el acusado dice ‘yo te quería lesionar, no te quería matar’, pero lo terminó matando”, subrayó.
Y cerró: “La Fiscalía está viendo qué otro delito se le puede imputar a la familia. Yo calculo que entre una semana y 10 días van a tardar para saber qué fue exactamente lo que pasó. Este es un caso muy interesante jurídicamente porque está muy opinado, ¿fueron a lesionarlo o a matarlo? ¿Con una mejor atención en el hospital se podría haber evitado la muerte o no? Es muy interesante”.
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