Estaban buscando al asesino y él lo sabía. Lo que sabía es que no había testigos ni cámaras de seguridad que, hasta el momento, les pudieran dar pistas a los investigadores. Una serie de allanamientos fue el punto de inflexión y, entonces, decidió entregarse: se trata de un joven de 22 años, acusado de ser el presunto asesino de un hombre de 65 en la localidad bonaerense de Virrey del Pino, partido de La Matanza.
El homicidio ocurrió el miércoles pasado, cuando al víctima salió de su domicilio para ir a trabajar. Se llamaba Cesar Antonio Chávez y su homicida lo interceptó, lo apuñaló y escapó. La víctima no logró sobrevivir a la fatal herida de arma blanca y quedó tendido sin vida en medio de la calle, en la intersección de Juan M. Cabot y Zapaleri.
Los vecinos de esa cuadra de La Matanza dieron aviso al 911 y los médicos constataron que Chávez había muerto. Ningún testigo había logrado ver nada, tampoco había cámaras de seguridad.
El caso quedó a cargo del fiscal Federico Medone, de la UFI Temática Homicidios de La Matanza, quien rápidamente comenzó a investigar el crimen. Tras algunos días de intentar reconstruir los momentos previos al ataque, ordenó este miércoles cuatro allanamientos en distintos domicilios por la zona. Los operativos habían dado resuelto negativo.
Sin embargo, el principal sospechoso se vio acorralado y, finalmente, se entregó este jueves en la comisaria 1ª de San Justo.
El presunto asesino se identificó como Esteban Damián Flores, de 22 años, oriundo del barrio Nicole en Virrey del Pino. Flores fue enviado a un calabozo a la espera de ser llamado a declarar, imputado por el delito de homicidio agravado. Según indicó un investigar del caso, está sospechado de atacar a más víctimas bajo la misma modalidad.
Pocos días atrás, el cuerpo de un hombre mayor con 28 puñaladas y envuelto en una lona fue hallado en un monte en proximidades de la localidad bonaerense de Teniente Origone, partido de Villarino, cercano a la ruta nacional 3, y los investigadores realizaban distintas diligencias en procura de identificar a la víctima.
El hallazgo se produjo cuando un ocasional automovilista detuvo su vehículo en el kilómetro 740 de la Ruta Nacional N°3, a pocos kilómetros de la localidad de Teniente Origone. En esas circunstancias, el conductor observó que en un sector de eucaliptos se encontraba el cuerpo de un hombre en avanzado estado de descomposición, por lo que alertó a la Policía de inmediato.
Poco después del llamado, se hicieron presentes en el lugar integrantes de la Patrulla Rural de Villarino y personal médico, quienes determinaron que el fallecido es un hombre de entre 60 a 70 años, que estaba envuelto en una lona y presentaba heridas cortopunzantes en distintas partes del cuerpo, detallaron las fuentes consultadas.
El caso quedó a cargo del fiscal Jorge Viego, titular de la UFIJ N°5 de Bahía Blanca. Los forenses determinaron que el cadáver tenía lesiones en el rostro, en el cuero cabelludo y cortes en la zona de la espalda, presuntamente realizadas con un arma blanca. Luego, el funcionario judicial ordenó que se realice la autopsia.
Según indicaron fuentes judiciales a Infobae, el informe preliminar determinó que la víctima medía de 1,75 metro de altura y pesaba aproximado de 90 kilos. Además, detallaron que el cadáver presenta una calvicie incipiente, con pelo canoso, ojos marrones y una prótesis dental en el maxilar inferior y otra faltante en el maxilar superior. También tiene cicatriz de vieja data en el dorso del pie izquierdo, cerca del tobillo, de unos 5 centímetros de largo.
Se constataron en el cuerpo un total de 28 heridas de arma blanca, todas punzo penetrantes, de un solo filo y de una longitud máxima de dos centímetros. Dos de las puñaladas fueron en el pecho, lo que provocó la perforación del pulmón izquierdo, indicaron las fuentes del caso a este medio.
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