El empresario acusado de matar a sus padres por dinero pidió ampliar su declaración ante la Justicia

Martín Santiago del Rio, el empresario acusado de asesinar a sus padres en Vicente López, quiere habar nuevamente. Por lo menos eso quedó expresado en el pedido de ampliación de indagatoria que en las últimas horas presentó su abogada, Mónica Chirivin. En esta oportunidad quiere hacerlo no sólo frente a los fiscales del caso, sino también ante el juez que entiende en el expeidente. Cuando se produzca esa declaración, será la quinta vez que el acusado se exprese en el marco de la causa.

Por otro lado, Diego Del Rio, el otro hijo del matrimonio asesinado, se presentó como particular damnificado y hasta designó un perito psiquiatra para que se haga presente en la causa que investiga el doble crimen. Esta presentación no es menor, ya que Diego fue acusado por su hermano de ser el autor material del homicidio, algo que los fiscales descartan por completo.

En la presentación que realizó Martín Santiago para pedir declarar nuevamente en indagatoria, se destacan algunos párrafos cargados de críticas al buen trabajo que vienen realizando los fiscales Alejandro Musso, Marcela Semería y Martín Gómez, coordinados por el fiscal general John Broyad.

“Esta defensa considera suficiente motivación la arbitrariedad manifiesta por parte del Ministerio Publico Fiscal, denotada por actuaciones y testimoniales tomadas sin considerar la presencia de este abogado defensor”, dice el escrito al que accedió Infobae.

A diferencia de declaraciones anteriores, Del Rio solicitó que, durante su indagatoria, este presente, además de los fiscales, el juez Ricardo Costa. “resulta imprescindible la presencia del señor juez de garantías, ya que los dichos de mi defendido fueron tomados siempre como inverosímiles, manteniéndose los señores fiscales en la sola hipótesis de enrostrar el aberrante crimen a Martín del Rio”, completa el documento firmado por la abogada Chirivin.

En cuanto a las pruebas, que siguen produciéndose, los fiscales fijaron la fecha del 3 de octubre para que se realice un cotejo de ADN clave. Hace algunos días le extrajeron sangre al acusado para compararla con los rastros encontrados en la escena del crimen. Si bien no será concluyente, un resultado positivo podría aumentar las sospechas contra el menor de los Del Rio.

Mientras tanto, Diego Del Rio ya empezó a tener injerencia en la causa. La presentación que realizó para ingresar al expediente cuenta con una curiosidad. Fu realizada por su abogado, el doctor Marcelo D´Angelo conocido, particularmente, en San Isidro, el departamento judicial que investiga el doble crimen de Vicente López. Es que el abogado es, además, defensor del fiscal Claudio Scapolan, acusado de formar parte de una banda de narco policías que operaba en la zona en distintas zonas del Conurbano. Ese escandaloso expediente era manejado por la jueza Sandra Arroyo Salgado, hasta que fue recusada. D´Angelo también formó parte de la causa que investiga la muerte de Diego Maradona, patrocinando a Jana, la hija del Diez.

D´Angelo llega a la representación del mayor de los Del Rio, por ser socio del doctor Felix Linfante, abogado y amigo hace más de 20 años del padre asesinado, José Enrique Del Rio.

En la misma presentación, el hermano del acusado presentó un perito psiquiatra para la causa. Esta designación tampoco escapa a la polémica. El especialista designado se llama Gustavo Ronald Falcón. Es un medico psiquiatra que durante varios años fue director del Hospital Marcelo Torcuato Alvear donde recibió una serie de denuncias por maltratos y acoso laboral hacía integrantes del staff del lugar.

Más allá de esto, en cuanto a las pruebas del expediente en sí, en los próximos días se conocerán detalles del material que surgió del teléfono de Martín Santiago del Rio. Del aparato ya se extrajo toda la información y ahora se analiza el contenido. El equipo del fiscal Musso está a cargo de desmenuzar cada uno de los mensajes, audios y llamadas que realizó del Rio en los días previos y posteriores al hecho, algo que podría transformarse en material esencial para el expediente.

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