Dos mujeres fueron asesinadas de un tiro en la cabeza cada una en la mañana de este viernes en barrio Nuevo Alberdi, en la zona norte de Rosario.
Las víctimas eran amigas y vecinas, y sus cuerpos fueron encontrados en el interior de una casa de construcción precaria ubicada en Luzarriaga al 2400. Según la información que tiene el fiscal a cargo del caso Patricio Saldutti, los cuatro hijos de una de las jóvenes presenciaron el doble femicidio.
El llamado al 911 que alertó sobre el hecho ocurrió pasadas las 6 de la mañanas. Cuando llegó al lugar, un móvil del Comando Radioeléctrico constató que las mujeres estaban dentro del domicilio, una tendida en el suelo y la otra sobre una cama, con heridas de arma de fuego en el cráneo.
De acuerdo a la información preliminar, las víctimas fueron identificadas como Carla Cabaña, de 33 años, y Magalí Páez, de 19. Quien vivía en el lugar era Cabaña, aunque “Magui” –como le dicen sus familiares– se mudó allí “hace un par de días” porque se había ido del domicilio en el que convivía con su pareja.
Si bien aún no estaba establecida una hipótesis, Camila, hermana de Magalí Páez, expresó en Radio 2: “La había venido a buscar la semana pasada para que se venga a vivir conmigo, que estoy sola con mi hija. Me dijo que lo iba a pensar, y ahora nos enteramos de esto”.
“Ella antes estaba viviendo acá a la vuelta, en la casa de su suegra con su pareja, que ahora está desaparecida por lo que me dicen”, agregó.
Según contó su hermana, “Magui trabajaba en un comedor comunitario del barrio” y tenía una relación conflictiva con su novio. “Andaba medio medio con su pareja, iba y volvía. Nunca nos contaba nada”, concluyó.
En conferencia de prensa, el fiscal Saldutti informó: “Por lo que me dicen los criminalistas, los disparos fueron a corta o media distancia, dentro de la vivienda. En el lugar había dos vainas servidas calibre 9 milímetros y ambas tienen un impacto en la cabeza. Se activó el protocolo de femicidio, así que los cuerpos van a ser trasladados con sus respectivas vestimentas al Instituto Médico Legal de Rosario”.
El fiscal enfatizó que al momento del doble femicidio estaban las dos mujeres y los cuatro nenes de una de las víctimas. “El lugar es muy chiquito. No sabemos si había posibilidad de defensa o de huida. El inmueble tiene cocina con una cama, y una habitación que es la de los nenes. Había droga, pero veremos si tiene relación con el hecho”, amplió.
Los niños iban a ser trasladados por orden del fiscal para ser entrevistados por un equipo interdisciplinario. “Vamos a ver si pueden contar algo”, sostuvo el funcionario del Ministerio Público de la Acusación.
Con este doble femicidio, en el departamento Rosario hubo 210 crímenes en lo que va del año, según datos del Observatorio de Seguridad Pública, un organismo provincial integrado por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación.
En la noche de este jueves también fue asesinada una mujer. En este caso, fue en Génova y Chaco, en barrio Empalme Graneros, en la zona noroeste de Rosario.
El fiscal Saldutti, que también interviene en esa investigación, relató que Ludmila Loreley Orellana, de 22 años, estaba en la esquina, cuando frenó una moto con dos ocupantes con la que comenzó a dialogar. En un momento, de acuerdo a la filmación que llegó a sus manos, uno de los que estaba en el vehículo le dio ocho tiros. El único dato que aportó como posible hipótesis es que la pareja de Orellana es un preso.