Condenaron a prisión perpetua al policía que mató a balazos a la travesti Melody Barrera en Mendoza

Se trata del efectivo Darío Jesús Chaves Rubio, quien recibió la pena por el delito de homicidio agravado por odio a la expresión de género o identidad de género. El acusado fue hallado culpable por un jurado popular. El crimen ocurrió en 2020

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Tras los alegatos, activistas y familiares de Melody Barrera pidieron una condena por travesticidio
Tras los alegatos, activistas y familiares de Melody Barrera pidieron una condena por travesticidio

Tras cuatro días de juicio, el policía de la provincia de Mendoza, Darío Jesús Chaves Rubio, fue condenado a prisión perpetua por trasvesticidio de Melody Barrera, a quien acribilló de seis balazos en medio de una discusión ocurrida la madrugada del 29 de agosto de 2020, en la localidad de Guaymallén. El efectivo, que estaba preso en una penal provincial, ya había sido hallado culpable por un jurado popular. Sólo restaba el monto de la pena y la Justicia finalmente habló.

La sentencia impuesta al acusado fue dada a conocer pasadas las 22 de ayer por la jueza técnica Nancy Lecek, quien indicó que el efectivo fue condenado por el delito de homicidio agravado por odio a la expresión de género o identidad de género, en concurso ideal con homicidio agravado por la condición de sujeto activo, por alevosía y ensañamiento, y agravado por el uso de arma de fuego.

El fiscal en jefe de Homicidios del Ministerio Público Fiscal de Mendoza, Fernando Guzzo, consideró en su alegato frente a los 12 jurados populares que durante el juicio quedó acreditado que Chaves Rubio cometió “un travesticidio”, que nunca se arrepintió y que su ataque contra Melody fue cometido con “alevosía y ensañamiento”.

De acuerdo con la agencia Télam, el fiscal Guzzo, acompañado por su colega Andrea Lazo, utilizó una frase contundente declarada por uno de los testigos: “Rubio fue, buscó un arma y cagó a tiros a un trava, lo hizo en seis oportunidades a Melody”.

Según la reconstrucción que hicieron los representantes del Ministerio Público Fiscal (MPF), aquel sábado 29 de agosto del 2020 el policía “llegó con su auto y discutió con la víctima, quien se defendió lanzándole gas pimienta. Luego le dijo a un chofer de Cabify que pasaba por el lugar que iba a buscar un arma para volver a cagar a tiros a ‘estos travas’”.

”Chaves Rubio regresa y la acribilla. En el lugar hallaron seis vainas, luego del hecho se dio a la fuga. La mató por la espalda, sin la posibilidad de reacción de la víctima, es alevosía”, dijo el fiscal, quien agregó que “quedó acreditado que fue un asesinato cruel, con sufrimiento a la víctima, sin que ella pudiera defenderse”. De los seis balazos, cinco atravesaron a la víctima. Según confirmó uno de los peritos del Cuerpo Médico Forense en su testimonio, Melody falleció por un shock hipovolémico. Es decir, por pérdida de sangre.

Para el fiscal Guzzo, el imputado “planeó la venganza por más de una hora, quería la muerte y sufrimiento de la víctima” y afirmó que al acusado “no le salió una disculpa, porque para él Melody fue un objeto”.Luego, la fiscal Lazo recordó que la víctima, tras recibir la balacera “estuvo más de treinta minutos agonizando”, con lo que justificó que el acusado Rubio “causó daño y sufrimiento” en Melody.

El acusado Darío Jesús Chaves Rubio era auxiliar principal de la Comisaría 34 del barrio Bancario de Godoy Cruz en la provincia de Mendoza
El acusado Darío Jesús Chaves Rubio era auxiliar principal de la Comisaría 34 del barrio Bancario de Godoy Cruz en la provincia de Mendoza

Según la investigación, mientras la joven ofrecía servicios sexuales el hombre la mató de seis balazos desde un auto y luego escapó. Tres semanas después del violento crimen, el MPF, luego del análisis de cámaras de seguridad de la zona y del testimonio de algunos testigos, ordenó la detención del policía. Al momento del arresto, el uniformado cumplía funciones auxiliar principal de la Comisaría 34 del barrio Bancario de Godoy Cruz. Portaba la misma arma con la que acribilló a Barrera.

“Es un homicidio, por odio, prejuicio por la identidad e igualdad de género, porque no solo insultó cuando dijo trava de mierda, sino que tuvo una conducta violenta y se valió de la pistola proporcionada por la policía”, dijo.

Por su parte, la abogada Viviana Beigel, quien representó como querellante a los familiares de la víctima, también solicitó con firmeza al jurado popular que declare a Chaves Rubio culpable del homicidio con los agravantes del “travesticidio, por alevosía, ensañamiento y por ser miembro de una fuerza de seguridad”.

”El cuerpo de Melody habla, no hubo pelea, no tenía lesiones de defensa, no hay pruebas que ella robó”, dijo la abogada, quien afirmó que el acusado “mintió”. Por su parte, la defensa del imputado, Pablo Cazaban, pidió al jurado popular analizar “las circunstancias” del crimen y que se considere que el policía se “excedió en su legítima defensa”.

El argumento del policía

Por su parte, la defensa del imputado, Pablo Cazaban, pidió al jurado popular analizar “las circunstancias” del crimen y que se considere que el policía se “excedió en su legítima defensa”. ”Melody, ese día, se encontraba en la Costanera, luego hubo una agresión injusta de Melody a Darío, en tal sentido está acreditado que Melody lanzó gas pimienta dentro del auto, estando Darío en el interior”, afirmó el letrado, quien agregó que “al momento de la detención, los policías abrieron el automóvil y aún había olor a gas pimienta, eso indica que el ataque fue adentro del auto, la agresión existió, está claro y comprobado que existió”.

El policía condenado
El policía condenado

El defensor planteó la posibilidad de que la víctima le haya arrebatado el arma reglamentaria al policía y que “Melody le disparó, pero que la bala no salió porque el arma tenía seguro”.

”No queremos un hecho impune, pedimos que se lo declare culpable pero de un homicidio en exceso de defensa, agravado por el uso de arma de fuego”, concluyó.

La jueza Lecek le ofreció finalmente al acusado pronunciar sus últimas palabras: “Estoy arrepentido por la muerte de Melody”, dijo de pie ante el jurado popular el policía Chaves Rubio, quien prestaba servicios en la comisaría 34 de Godoy Cruz, aunque en el momento del hecho se encontraba fuera de servicio.

”Defendí mi vida, sentí que me iban a matar, me defendí por mi familia e hija, espero que tomen la medida más justa, lamento por el daño que cause a la familia, pido perdón”, agregó.

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