Misterio por el crimen del jubilado de Recoleta: su departamento estaba revuelto pero encontraron tres mil dólares

La división Homicidios de la Policía Federal está a cargo de esclarecer la muerte de Raúl Carlos Schiavo, 81 años, ex administrativo de la misma fuerza. Investigan al hombre de 25 años que convivía con la víctima

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Schiavo en un viaje al
Schiavo en un viaje al exterior, foto de mediados de la década pasada.

La Justicia investiga el crimen de Raúl Carlos Schiavo -de 81 años, ex administrativo de la Policía Federal Argentina, retirado hace 15 años- hallado muerto la semana pasada en su departamento de la calle Las Heras en Recoleta. La división Homicidios de la misma fuerza federal está a cargo de esclarecer el homicidio.

Hasta ahora, las sospechas se concentran en un joven de 25 años que convivía con la víctima a tiempo completo; su “asistente”, lo define un investigador. Fuentes del caso aseguran que, según vecinos del edificio, Schiavo empleaba un andador o un bastón y necesitaba ayuda a tiempo completo. Según este relato, el joven -que sería hijo del portero del edificio- había dejado de ser visto en el lugar días antes del hecho. Por lo pronto, no tiene pedido de captura, en una causa a cargo del juez Luis Schelgel y el fiscal Santiago Vismara. El joven se convierte en un candidato obvio, pero los investigadores operan con cautela.

El departamento estaba notablemente revuelto, con cajones revueltos y el cadáver de Schiavo en su habitación. La escena se asemejaba a la del parricidio y matricidio en Vicente López, atribuido al empresario Martín Del Rio, un posible robo. Sin embargo, la PFA descubrió al regresar al inmueble que había tres mil dólares en el lugar y que eran fácilmente accesibles, afirman fuentes de la causa.

El edificio, descubrieron también, no tiene cámaras de seguridad. Las entrevistas con los vecinos no arrojaron otros datos significativos.

El joven que convivía con
El joven que convivía con Schiavo no tiene pedido de captura.

Fue un sobrino de Schiavo quien alertó a la Policía de la Ciudad luego de días de no saber nada de Raúl Carlos, que no respondía a sus llamados. Tenía las llaves del departamento de su tío, pero antes de ingresar, notificó la situación al 911.

Así, el denunciante y la fuerza porteña vieron el desorden en el departamento y encontraron el cuerpo de Schiavo “tendido boca arriba en la cama, sin aparentes signos vitales, con su piel casi de color violeta y el cuerpo hinchado, apreciándose en el cuello del occiso una marca”, asegura un reporte posterior.

Llamaron de inmediato al SAME, que constató la muerte. Se cree que Schiavo habría fallecido al menos 72 horas antes del hallazgo de su cuerpo, dada la descomposición.

Sin embargo, esa lesión no fue notada en el reporte posterior de la morgue. Con respecto a cámaras del Centro de Monitoreo Urbano de la Policía de la Ciudad, hay varias cercanas a la zona del hecho: se encuentran en las intersecciones de Callao y Las Heras, Junín y Vicente López, y Uriburu y Las Heras.

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